El peor de los pronósticos se han cumplido para Antonio Orozco (50 años), que ha tenido que anunciar que se pospone su gira europea por motivos de salud. El cantante llevaba meses arrastrando dolores de garganta que además de producirle una leve afonía, le obligaron a pasar por quirófano hace unos días.
Si bien esperaba que con la intervención, en la que se le extrajo un pólipo, se resolviera todo, lo cierto es que no ha sido así y los conciertos previstos para Londres, París, Bruselas y Dublin tendrán que esperar. "Siento muchísimo anunciar esto, pero solo necesito un poco más de tiempo para acabar de recuperarme. Quiero estar al 100%, os lo merecéis y estoy haciendo todo lo posible para que suceda. Lo siento y gracias por la comprensión", ha escrito en su perfil de Twitter este martes 21 de marzo, junto al comunicado oficial.
Las nuevas fechas se darán a conocer este jueves 23 y todo apunta a que se ajustarán para después del mes de septiembre, cuando Antonio terminará su gira española en Tenerife. EL ESPAÑOL se ha puesto en contacto con la oficina de representación del cantante, que tras los últimos acontecimientos está pendiente de su mejoría hasta el punto de que no pueden asegurar con rotundidad la nueva fecha del que debería ser su regreso a los escenarios, previsto para el 19 de mayo en Ciudad de México. "A día de hoy se celebrará, pero hay que ir viendo su evolución con el médico", han afirmado.
"Su voz no está preparada", aseguran desde su agencia, que insiste en que Orozco está trabajando con diferentes profesionales para recuperarse en el mejor tiempo posible y regresar con sus fans.
El gran problema, tal y como ha asegurado él mismo en sus redes, es que no es capaz de mantener la voz durante dos horas seguidas, tiempo medio de sus conciertos. "Sería demasiado para pedirle a mi garganta y mis cuerdas", ha afirmado con gran pesar, pidiendo perdón en una decena de ocasiones a sus seguidores.
La última vez que Antonio Orozco se subió al escenario fue este pasado 18 de marzo durante la celebración de La Noche de Cadena 100. Era su regreso tras su operación de garganta y por lo tanto una cita muy especial, tanto que no pudo reprimir las lágrimas al notar el cariño del público, que le ayudó a cantar en diferentes ocasiones.