El grupo Locomía está siendo diezmado. Los míticos artistas que abanderaron la alegría de vivir a golpe de abanicazo en Ibiza están atravesando por momentos durísimos debido a la muerte de tres de sus miembros en un corto espacio de tiempo. Este miércoles, día 22 de noviembre, se conoció la última, la de Francesc Picas. Sus familiares han utilizado las redes sociales del cantante para comunicar que "su luz se ha apagado". Ha fallecido a los 53 años en la ciudad de Barcelona.
Pero si 2023 ha sido un año oscuro para Locomía, no menos lo fue 2018, cuando en un mes, perecieron dos de sus integrantes. Dos enormes e irreparables pérdidas que conmocionaron al panorama nacional y evocaron entonces un miedo mayor: una posible maldición alrededor de la formación histórica.
Ellos eran Santos Blanco y Frank Romero, que a pesar de todo nunca coincidieron sobre el escenario, no actuaron juntos y no entonaron sus temas al mismo tiempo. Sí cantaron las mismas letras, vistieron los mismos estilismos y arrancaron el baile de sus espectadores. Ambos, integrantes de Locomía en diferentes épocas, murieron a la temprana edad de 46 años.
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Santos Blanco fallecía el 15 de junio por "causas naturales", una primera pérdida que conmocionó a todas las personas que alguna vez han agitado los abanicos al ritmo de Locomía. Con la misma edad se fue Frank Romero. Una bacteria fue la causante del terrible suceso tal y como adelantó EL ESPAÑOL en exclusiva.
Fuentes próximas al artista onubense concretaban a este medio que dicha infección habría sido una encefalitis bacteriana, una rara afectación del sistema nervioso central, causante de una inflamación del cerebro y médula espinal provocada en la mayoría de las ocasiones por virus y no por bacterias.
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Aquel grupo que en sus inicios nació como una asociación en honor a la moda y no a la música, vive uno de sus momentos más complicados. Desde la actual agencia de representación de Locomía confirmaron en su día el descontento con respecto a la palabra maldición. "Están pasando un cúmulo de cosas con las que hay que lidiar, molesta mucho que se hable de maldición", explicó Jordi Tarré a este diario.
Dos muertes en 31 días, cifras que hicieron tambalear a la cordura y causaron todo tipo de especulaciones. Los actuales miembros de Locomía quisieron alejarse de la palabra "maldición" y atesoran una buena imagen por su parte. "No hay ningún miedo", aclaró Félix Montás, cantante del conjunto. "Hay que seguir adelante, lo que ha pasado es que han sido fallecimientos muy seguidos pero para nada hay una maldición, estamos todos perfectamente", detalló Félix en el verano de 2018 a este medio.
Por Locomía han pasado 15 artistas diferentes, en distintos años y agrupaciones, pero todos bajo el mismo nombre. El grupo ha ido evolucionando durante los años y ha sobrevivido a los vaivenes de los diferentes integrantes. "Ha habido tantas muertes porque la vida pasa", espeta Félix.
La carrera de un grupo histórico
En 1992 la formación original se separó tras ocho años de éxito. Un año más tarde y ya con nuevos integrantes, volvió a aparecer en la escena musical. Pero en 1994 las carreras en solitario empezaron a despuntar para dar paso a nuevas vidas laborales. Sus caminos separaron y no fue hasta 2007, cuando Xabier Font -miembro original del grupo- y Manuel Arjona regresan con una nueva formación e inician una gira a nivel internacional. Aquello fue el inicio de un nuevo regreso por todo lo alto.
En 2011, los dos cantantes anuncian la vuelta a los escenarios de la nueva agrupación de Locomía junto a Ricky Arenas, Félix Montás y Ferry Frías. La actual formación corresponde a la unión que en 2016 se hizo alrededor de Alfon Pedrazuela, Eden Cañadas, Ricky Arenas y Félix Montás.
Aunque los años y las personas han pasado por Locomía, los intérpretes siempre han mantenido muy buena relación. Lo que unió Locomía se ha mantenido a lo largo del tiempo, un nexo fortalecido tras las repentinas y tempranas muertes de tres de sus miembros más conocidos.