Desde que fuera detenido por primera vez en diciembre de 2020 por los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas, Rafael Amargo (48 años) no ha levantado cabeza. En marzo de 2023 le volvieron a detener en Alicante donde se encontraba actuando al ser acusado, supuestamente, por traficar con drogas en su casa en el barrio de Malasaña.
Y a principios de diciembre, la Audiencia de Madrid ordenó su ingreso en la prisión de Soto del Real por riesgo de fuga así como por el quebrantamiento reiterado de la obligación de firmar el 1 y el 15 de cada mes en el órgano judicial. El Año Nuevo lo pasará entre rejas ya que está previsto que su juicio empiece el próximo 8 de abril de 2024. A petición de la Fiscalía se enfrenta a 9 años de cárcel.
Entre todas estas fechas, el bailarín y coreógrafo estuvo preparando su último espectáculo con el que tuvo un gran éxito cuando lo mostró, por ejemplo, en el palacio de Dueñas de Sevilla y en el Museo Thyssen de Málaga, siendo este el último lugar donde actuó antes de ingresar al calabozo. A priori, también supuestamente se encontraba terminando el Máster en Salud Mental y Drogodependencia por la Universidad de Barcelona y tenía que haber presentado la tesis el pasado noviembre que habría llevado el título de La búsqueda de inspiración y el uso de las drogas en el arte: ¿mito o realidad?
Tras pasar por diferentes sustos desde aquella fría noche de diciembre de hace tres años, Amargo prometió enmendarse y dedicarse en cuerpo y alma a su profesión y ayudar a los demás. Su cerebro no paraba de hervir ideas y estaba feliz de que se llevaran a cabo, como ir de gira internacional con uno de sus shows y la publicación de un libro sobre la adicción a las drogas. Sin embargo, su sueño se ha truncado.
Sus padres, Antonia y Florentino, se encuentran no solo hundidos emocionalmente sino
que el progenitor tuvo que ser ingresado hace unas semanas porque se agravó su estado de salud. Su hermano mayor Miguel Ángel ha intentado ser un bastión fundamental en su recuperación. En la actualidad ejerce como cámara de televisión en el programa Y ahora Sonsoles y recientemente describió a Sonsoles Ónega (46) la situación: "Esto es un tsunami para quien lo vive, supongo que nadie de aquí ha vivido un tsunami, pero cuando pasa un tsunami, lo que queda tienes que volver a reconstruirlo entero. Todo. Como por mi parte, mi hermano… Es difícil".
El juicio a Rafael Amargo está previsto que se celebre los días 8, 10, 11 y 12 de abril de 2024. Así lo adelantó este diario el pasado mes de octubre tras conversación con quien entonces era su abogado, Jaime Caballero. El juicio de Amargo se suspendió el pasado 7 de junio porque otro de los procesados, el productor teatral Eduardo de Santos, renunció a su abogado.
Serán juzgados el bailaor, Eduardo de Santos y un socio del artista, Manuel Ángel Batista León, acusados de integrar un grupo que traficaba con droga, fundamentalmente metanfetamina, que presuntamente vendían desde el piso de Amargo. De cara al juicio la Fiscalía pide nueve años de cárcel para el artista y para el productor, y seis años para el otro acusado.
El bailaor y coreógrafo ha pasado de saborear las mieles del éxito en España y fuera de nuestras fronteras, algunos de sus espectáculos han sido llevados hasta China y Japón, a vivir encerrado entre rejas. En su poder cuenta con numerosos premios y reconocimientos como la Medalla de Oro del Mérito a las Bellas Artes 2016 y la Medalla de Andalucía 2018, entre otros.