No hay día en que la figura de la empresaria mexicana Genoveva Casanova (47 años) no se aborde en los diferentes platós de televisión y en los medios de comunicación españoles y allende los mares. Es el personaje del momento, y la entrevista más buscada y cotizada, desde aquellas fotografías con el hoy rey de Dinamarca, Federico X (55), paseando por las calles de Madrid.
Tal fue el revuelo que se creó que la exmujer de Cayetano Martínez de Irujo (60) desapareció del foco público y, con la salvedad de unas instantáneas que la situaban en San Sebastián hace unas semanas, no existe aún material gráfico de la también concursante de MasterChef Celebrity. Genoveva blindó su vida y se aisló de todo y de todos.
Sólo un círculo muy reducido de personas sabe cómo se encuentra y puede hablar con ella en su día a día. Pasó Nochebuena, el pasado 24 de diciembre, en la capital de España, en su residencia habitual, pero después volvió a abandonar la ciudad con destino desconocido. La periodista Paloma Barrientos la situó hace unos días en México, donde viajó para estar con su familia, y EL ESPAÑOL conoce sus planes más próximos.
Al cierre de este artículo, el entorno de la mexicana la continúa ubicando en el país azteca. Genoveva no está bien, anímica y físicamente hablando. "Están preocupados porque está muy delicada de salud. Están preocupados, se está haciendo pruebas", avanzó hace unos días Pilar Vidal en el espacio Espejo Público. Una situación de salud que se ha visto agravada por el escándalo danés.
Casanova preocupa a su entorno más próximo y hace unos días tomó una decisión que sorprendió a propios y extraños. Desde México, inhabilitó -a efectos prácticos, eliminó- su perfil en la red social Instagram. Cierto es que en las últimas semanas, después de las fotografías con Federico, todo lo que la mexicana posteaba se convertía en noticia, extremo que no ha ayudado, precisamente, a su bienestar.
EL ESPAÑOL ha podido conocer que esta decisión de borrar todo rastro en sus redes obedece, única y exclusivamente, al consejo médico que Genoveva ha recibido, amén de los certeros consejos de sus familiares y amigos. No está lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a "cómo se interpretan sus acciones".
En palabras de su entorno, la que fuera nuera de Cayetana de Alba entiende que la forma en que se leen sus movimientos "es una pesadilla que no acaba". Ni ella pretende alimentar nada ni su silencio es una forma de agigantar el interés por su testimonio: ya anunció hace unos días este medio que la empresaria no va a hablar de esta cuestión ni ahora ni en un futuro.
Sea como fuere, lo que puede acreditar EL ESPAÑOL es que Casanova seguirá aislada y sin retornar a los focos. Enero de 2024 era el mes, a priori, en que tenía pensado volver a sus obligaciones profesionales y reconectar con su rutina en la capital de España. De hecho, según le consta a este medio, Genoveva tenía apalabrados dos compromisos profesionales, pero ha decidido alargar su período de descanso y recuperación.
"Con el perjuicio económico que le supone", añade el informante, aunque el tema económico no es una cuestión que le preocupe en estos momentos a Casanova. Tal y como han desvelado este pasado lunes, 22 de enero, en Y ahora Sonsoles, los perros de Genoveva se encuentran en España. En concreto, en una finca de Sevilla, propiedad de Cayetano.
En cuanto a la relación que libran en la actualidad Genoveva Casanova y Federico de Dinamarca, tras el tsunami de las fotos -cabe puntualizar que la propia mexicana aclaró, en su comunicado, que "nunca ha existido relación sentimental" entre ellos-, la periodista Paloma García Pelayo ha actualizado datos.
Según esta profesional, "la propia Genoveva dijo que era su amigo. Los amigos hablan y hoy puedo pedir que Federico la apoya en todo lo que realiza. Es un apoyo para ella en todos los sentidos". Es decir, que el hijo de Margarita II (83) y Genoveva nunca han interrumpido el contacto, y él es consciente y partícipe de las decisiones que ha tomado la socialité.
"El silencio es lo único que puede favorecer a Genoveva y le puede convenir y proteger. Y la decisión es firme", se ha apostillado desde el espacio de Sonsoles Ónega (46). Frente a la teoría de la mera amistad entre ellos, hace unos días, en TardeAR, se aseguró que el marido de Mary Donaldson "estuvo o está" enamorado de Genoveva.
"No era un tonteo. Genoveva no es de tonteos", aseveró Paloma Barrientos. En esa línea, habría sido la corte danesa, al corriente de esta relación de amistad, quien habría filtrado a la prensa las fotografías de la revista Lecturas para evitar un problema "gordo" si el hijo de la reina Margarita se hubiese planteado divorciarse antes de la abdicación de su madre.
Algo que, a la vista está, no ha sucedido, ya que Federico se convertía en rey este pasado 14 de enero y a su lado, derrochando complicidad, la ahora reina consorte Mary, con la que protagonizó un beso de película ante sus súbditos.