La detención y posterior ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, de Antonio Tejado (36 años) es uno de los grandes temas que centran la atención de los medios de comunicación en España en los últimos días. Un delicado trance que, indirectamente, está viviendo la familia más directa del que fue colaborador de televisión.
En concreto, su tía, la artista María del Monte (61), y la mujer de ésta, Inmaculada Casal (59), víctimas del asalto a su domicilio, perpetrado, supuestamente, por la banda criminal a la que pertenecería Tejado. Este miércoles, 14 de febrero de 2024, ha roto su silencio una persona que conoce a la perfección a Antonio, que se casó con él y, juntos, trajeron al mundo a su única hija en común: Alba Muñoz.
La que fue mujer de Antonio Tejado dibuja un perfil de éste bastante complicado, al mismo tiempo que recuerda los momentos más oscuros de su relación con él. "Me enteré de su detención por mi hija, llegó a casa llorando después de verlo en las redes sociales", "He aguantado cosas que no se deben aguantar, pensaba siempre en mi hija", "Me daba miedo dejar a mi hija con él", son sólo algunos de los titulares que ha aportado Alba en la revista Lecturas.
Añade Alba Muñoz, sobre el aciago tiempo que estuvo en relaciones con el sobrino de María del Monte: "Antonio era celoso, yo lo achacaba a que tenía adicciones. (...) Mi hija tiene ayuda psicológica y creo que, al final, yo también tendré que cogerla, porque he pasado mucho, he tragado mucho. Y ya he tocado fondo. (...) No me he curado de lo que viví con Antonio".
Sostiene Muñoz que aún no le ha informado a su hija de que su padre está en prisión provisional: "No sé cómo decírselo. (...) Tendré que dar la talla una vez más y ejercer de lo que he ejercido durante muchos años en la vida de mi hija, de padre y de madre".
Acerca de la figura como padre de Tejado, Alba desliza: "No ha sido un buen padre, ha estado ausente. Le tuve que decir a mi hija: 'tu padre no te recoge porque no le da la gana'. No lo denuncié porque no quería hacerle daño a mi hija. Tengo que hablar con ella para que, como mujer, saque una lección de vida".
En la citada interviú con el semanario, la exmujer de Tejado opina, además, de la tía de éste, María del Monte: "De María no puedo hablar bien. Durante mi matrimonio con Antonio yo no he vivido que ella tuviera cariño o apego hacia su sobrino. (...) Yo nunca he gustado a su familia. Antonio llegó a sentir a mi familia como la suya. (...) Ha sentido en mis padres el apoyo que no ha tenido en su casa".
Fue el 6 de enero de 2024 la última vez que, defiende Alba, ésta vio al padre de su hija: "Le acerqué a mi hija para que le diera los regalos de Reyes. Y hablé con él el jueves antes de la detención. (...) Es cierto que lo noté más perdido. Yo empiezo a temblar cuando me entero que ya no está con Samara -su última pareja-. Ella era el pilar que lo tenía encauzado".
Alba arguye que Antonio "ha sido un consentido -por su familia-. Le han tapado, le han quitado responsabilidades. Ha vivido muy bien porque ellos se han encargado de ello". Por último, habla el dolor de Alba como madre: "Mi hija tiene abuela y tiene tíos. Y aquí no llama nadie a mi hija para preguntarle cómo está o qué necesita. ¡Nadie se preocupa por mi hija!".
Hace unas horas, EL ESPAÑOL se hizo eco de que la última semana de Antonio Tejado en libertad no fue fácil. Su entorno lo vio "nervioso". Puede que una de esas personas que lo sintió con esa zozobra o tribulación fue su exmujer, y madre de su última hija, Alba Muñoz.
Se relató a este medio que ambos, pese a que su ruptura no fue fácil y por momentos no navegó en buenos términos, retomaron el contacto. Antonio se desahogaba y Alba le aconsejaba. Ambos hablaron el jueves, 8 de febrero, -como reconoce ella misma este miércoles-, horas antes de la detención.