El diestro Juan Ortega (33 años) ya está inmerso de pleno en su ilusionante temporada taurina. Ésa con la que tanto soñó a finales del aciago, para él, año 2023. Se volvió a vestir de luces el pasado 3 de febrero en México y, después, triunfó sin igual el día 10 en la plaza de toros de Valdemorillo, en Madrid. Está siendo, sin lugar a equívoco, su año más intenso y exitoso. 

Sus próximas citas en el coso tendrán lugar el 23 de mayo y 8 de junio en la Plaza de Toros de Las Ventas, en la capital de España. Tal y como desveló EL ESPAÑOL hace un tiempo, el torero, tras su comentada y polémica espantada eclesiástica a su razón de amor, Carmen Otte, está volcado en su retorno a las corridas de toros, y en eso ha tratado de focalizar su tiempo y atención.

Tan sólo rompió su silencio el 24 de enero del presente año en el espacio radiofónico de Carlos Herrera (66). El torero, como no podía ser de otra forma, fue interrogado por la polémica de su no boda. "Carmen y yo veníamos arrastrando problemas. (...) Asumo mi equivocación y pido perdón. (...) Soy el único responsable", son algunas de las palabras que entonó Ortega.

[El mensaje de Juan Ortega a Carmen Otte para avisarla de su entrevista: dónde estaba ella y la decisión que tomó]

Juan Ortega, el día que accedió a ser entrevistado por Carlos Herrera, el pasado 24 de enero, en Sevilla. Gtres

Transcurridos los días, y pasada aquella turbulencia informativa, este periódico ha podido conocer que tanto Juan como la familia de su hoy expareja, Carmen, sienten "alivio" al saber que ese huracán ha amainado. "Están más tranquilos, todo pasa", añade el informante, próximo al diestro sevillano.

Por su parte, Otte Alba, la que estaba llamada a ser su mujer ante los ojos de Dios, regresó a su puesto de trabajo, como informó EL ESPAÑOL, en un hospital de la capital hispalense. En lo que respecta a Juan, este medio tiene importantes novedades sobre su vida. Cuenta la fuente que Juan -quien hasta el momento está viviendo en casa de sus padres-, ha expresado a su entorno su deseo de "comprarse algo" para él solo. 

Disponer, así, de su propia vivienda, una suerte de inversión de futuro, un lugar donde instalar su residencia habitual. Lo único que tiene claro, y así se traslada a este periódico, es que desea que ese hogar sea en Sevilla. En su tierra y son sus raíces, donde, precisamente, había comenzado una vida conyugal con Carmen Otte en un piso de alquiler. 

Todavía no ha dado ningún paso al frente ni formal a este respecto, es sólo una mera ilusión, y así se ha hecho constar a EL ESPAÑOL. Hay que recordar que tras su polémica no boda con Carmen Otte, Juan desalojó la casa en la que vivía con su, por entonces, razón de amor y se instaló oficialmente en la casa de sus padres.

Juan Ortega en su 'rentrée' en México, el pasado 3 de febrero de 2024. Gtres

A los días, y viendo que la polémica no cesaba y que el día a día de sus progenitores se vio afectado por la presión mediática, se fue a vivir con un amigo. Afortunadamente, Juan Ortega cuenta con grandes conocidos que, en estos meses extraños y de transición, no han dudado en abrirle las puertas tanto de sus casas como de las distintas fincas familiares, en España y allende los mares. 

Al cierre de este artículo, y mientras termina de tomar forma la adquisición de un nuevo bien inmueble, Ortega sigue viviendo en el domicilio familiar. Allí es donde regresa después de cada faena. "Su vida ahora es en solitario y ya se ha adaptado. La vida es así, te cambia y listo", remacha a este periódico la persona que lo conoce.

En el plano sentimental, se desliza que la relación entre Juan y Carmen sigue siendo cordial y las cosas entre ellos están "bien". Hay contacto, ya no tan fluido como el que mantuvieron cuando tuvieron que cerrar la casa común. Abandonaron el piso de alquiler donde vivían en Sevilla y cada uno se centró en su carrera profesional y en restañar sus heridas. 

Sobre el amor, Juan habría tomado una suerte de determinación: no querer saber nada de esa cuestión. Es tiempo de reajustar sentimientos. No en vano, él "sigue sintiendo" por Carmen Otte, y es impensable para él en estos momentos pensar siquiera en rehacer su vida con una mujer. 

La actual vida de Carmen 

Carmen recuperó su vida laboral el pasado mes de enero. Tal y como le consta a este medio, fue después del día de Reyes cuando Otte se incorporó a su puesto de trabajo.

Carmen regresó, en la segunda semana del año, al centro médico donde lleva años trabajando -nunca formó parte de la plantilla del Hospital Universitario Virgen del Rocío, donde se la situó-, y confíaron a este periódico que no solicitó la baja laboral, como se deslizó días atrás. 

Otte Alba tan sólo llegó a un acuerdo con el centro médico y gastó días que le pertenecían para descansar, coincidiendo con la Navidad. Sostuvo a este medio quien está capacitado para hacerlo que Carmen Otte se mostró muy agradecida por el trato y la consideración que le dispensaron sus jefes.

Por otro lado, se sostiene que Carmen está viviendo con sus padres, en la casa familiar, en Jerez de la Frontera. De este modo, y de acuerdo con los datos que se manejan, la joven cardióloga viaja diariamente de Jerez a Sevilla para cumplir con sus compromisos profesionales.