Carla Pereyra (36 años) está viviendo en los últimos años una vida de ensueño. Se ha convertido en uno de los rostros más habituales de cualquier evento que se precie, donde demuestra su gusto por la moda y la importancia que tiene para ella la imagen.
Desde hace 10 años, forma una preciosa familia junto al entrenador del Atlético de Madrid, Diego Simeone (53), con quien se casó en 2019 y con quien tiene dos hijas: Francesca (7) y Valentina (5). Es a través de sus redes sociales donde la supertop model muestra un pequeño trozo de esa vida privada de la que está tan orgullosa.
Ahora, se ha convertido en madrina del Instituto Médico Láser (IML), que acaba de inaugurar su nuevo centro en la calle Clavel, en Madrid. EL ESPAÑOL ha podido hablar con ella de su interés por la estética y por su faceta como madre.
Recién aterrizada de Milán de disfrutar de la Semana de la Moda, ¿cómo se encuentra?
Muy bien. Estoy muy ilusionada. Todo lo que me una a la moda y a la belleza siempre va de la mano y siempre me emociona. Además, estoy muy feliz de estar aquí y poder participar en este opening.
Se convierte en madrina de Instituto Médico Láser y su nuevo centro. ¿Se considera una persona con una rutina muy clara para cuidarse?
Es bastante básica, pero sí. Un tónico, sérum y crema. Pero sí es verdad que me gusta hacerme tratamientos. Estoy muy pendiente de cuidar la piel, porque me gusta que esté muy limpia y firme. Hay muchísima tecnología y tenemos que utilizarla, a veces es invasiva, a veces no lo es tanto. Pero me gusta contar con expertos que me puedan ayudar a cuidarme.
Y confiar en buenas manos.
Totalmente. La tecnología está al servicio de todos, pero confiar en alguien, confiar en doctores y en expertos en el tema es fundamental. Gente que también sepa entender cuál es tu búsqueda y tu estética. Para gustos los colores. Cada uno se siente identificado de diferentes formas y a mí me gusta una piel muy natural, una cara que exprese sentimientos, emociones y bueno, me gusta estar en buenas manos.
¿Es de las que se obsesiona por la imagen?
Llegas a una edad donde hay un equilibrio en verte bien, en respetarte a ti misma y todo pasa por el autoconocimiento. ¿Cómo me quiero ver? No me quiero ver como una de chica 25 años ni como una de 40, que todavía no los tengo. Hay que saber respetarse a uno mismo, pero es verdad que el estrés y los factores del día a día nos juegan en contra. Siempre está la mano de los médicos para decir: 'Vamos a retrasar un pelín o, por lo menos, vamos a sostener esa buena cara y ese aspecto saludable'".
Es importante evitar ser una persona que no eres.
Claro, porque sé que se quedaría en un intento. Nunca podría ser algo que no soy, hay que respetarse, quererse y tirar pa'lante.
Lleva ya diez años junto a Diego Simeone, ¿cree que su relación ha ayudado a que se vincule más con el deporte, el cuidado, la salud y la alimentación?
Las personas que te rodean influyen totalmente en tu vida. Si te encuentras con personas sanas, con hábitos saludables, pues te vas a contagiar más. Si te encuentras con gente que sale todas las noches, vas a acabar así. El mejor cuidado empieza por elegir a la persona adecuada para que te acompañe, tanto en amistades, como en tu compañero de vida, como en personas que dejas que influyan en tu día a día. Me encontré con una persona deportista, que se cuida. Un hombre que tiene 50 años, pero que está muy bien plantado en sus 50. Estar con él me ha mejorado muchísimo y siempre lo digo. Creo que yo también le he mejorado a él, pero es algo que para mi entender es algo que tiene que suceder en las relaciones.
¿Y en qué punto se encuentra su relación?
Muy bien, porque llevamos diez años juntos. La verdad es que nosotros mantenemos mucho el cuidarnos como pareja, el tomarnos nuestro tiempo en salir a dar un paseo o a cenar. Somos padres, somos dos personas que trabajamos mucho y que tenemos una agenda muy intensa. Una vez por semana cenamos solos o vamos al cine. Necesitamos ese momento, aunque no sea para hablar, pero sí para estar juntos. Al final eso ayuda muchísimo a la pareja. Y también el respeto por su trabajo y por sus prioridades y el respeto a lo mío.
¿Cómo se define como madre?
Soy una madre en fase de aprendizaje, sobre todo porque nadie nace sabiendo cómo hacerlo. Cuando hay berrinches, veo que sacan una muy buena parte de mí. No me permito gritarles a mis hijas. Intento educarles como si fueran adultas. Si yo te grito, vas a pensar: "¿A esta loca que le pasa?". Los niños lo perciben igual. Soy superconsciente que cada cosa y el ejemplo que les doy es básico. Si yo les grito, van a salir a gritar a sus compañeros. Intento explicarles mucho el porqué de las situaciones. ¿Por qué papá viaja?, ¿por qué papá no está?, ¿por qué no te dejo ir a la casa de tu amiga?, ¿por qué priorizamos estar en familia? El diálogo es fundamental en la relación con mis hijas.
Son valores muy importantes que transmitir.
No las quiero tratar como niñitas. Los niños son superlistos, les explico todo para que ellas sean partícipes de que la decisión que toma mamá la hace por tal cosa y le guste o no le guste, es la decisión mía pero hay un por qué. Cuando hay un por qué el concepto lo absorben mejor.
¿Qué proyectos tiene en los próximos meses?
Tengo una empresa de reformas de viviendas y tenemos un proyecto muy grande que me tiene muy ocupada. Tengo tres edificios en construcción más el otro que estamos empezando ahora. Estoy bastante ligada a eso. Siempre salen cosas con la moda, con las presentaciones que me divierten mucho. Me gusta que me tengan como un referente, es un orgullo para mí. Mi día a día voy desde obras a presentaciones... me gusta porque en la versatilidad está el juego y está también que como mujer te superes a ti misma. Tengo 36 años, muchísimas ideas, proyectos... hay como una ebullición todo el tiempo. Me encanta poder desarrollarlo. Estoy en un momento de mi vida donde me siento segura, tengo un equipo en quien confío y para mí eso es clave. No sólo eres tú, es el equipo que tienes. Ese momento de equilibrio es muy saludable.