La noticia se conocía a primera hora de la tarde de este viernes, 12 de abril: Rafael Amargo (49 años) ha conseguido la libertad provisional, sin medidas cautelares, hasta que se conozca la sentencia. Ha sido la Sala de la Audiencia Provincial de Madrid quien ha dejado al artista en libertad, tras haber sido acusado de vender droga desde su casa.
Amargo tendrá la obligación de firmar en el juzgado cada 15 días. Este mismo viernes, el andaluz ha abandonado la prisión de Soto del Real, arropado por su mujer, Luciana Bogniano, y su abogado, Marcos García Montes, quienes llegaban a la cárcel pasadas las siete de la tarde.
El artista, elegantemente vestido con camisa y pantalón oscuro, y con el pelo engominado, ha salido de la cárcel cargado con cuatro bolsas con sus enseres personales. Nada más traspasar el umbral de la cárcel, Amargo se ha fundido en un emocionante abrazo con su mujer y, más tarde, con su letrado.
"He tenido una maravillosa defensa. Quiero agradecer al tribunal, darle las gracias a mucha gente de la institución pública, como es la Policía. Estoy muy emocionado, me voy y dejo ahí dentro a mis compañeros del módulo terapéutico...", han sido sus primeras y emocionadas palabras ante los medios de comunicación allí congregados.
Sobre cómo ha vivido estos cinco meses entre rejas, privado de libertad, Rafael sostiene: "Una prisión es una prisión, he intentado llevarlo lo mejor posible. He sentido mucho cariño por parte de todos los internos". Se mantiene fuerte y seguro y confiado en que se demostrará su inocencia.
"Si no sale bien, vamos a recurrir hasta donde haga falta. Tengo que volver a empezar de cero. Me merezco comerme aunque sea una hamburguesa", ha dicho, con gran sentido del humor, y agrega: "Luciana -su mujer-, si hay un altar es el que se merece ella. No ha faltado ningún día, han intentado arruinarle su carrera como actriz. Espero que la gente no tenga prejucios con ella".
Sin dejar de abrazar y besar a su razón de amor, Rafael apunta: "Espero que Dios pronto la devuelva donde tiene que estar: en los escenarios, porque es una gran actriz", ha apostillado. Asegura el bailaor, esperanzado, que "en breve va a salir la resolución".
"He hecho un máster de drogodependencia en la universidad. El sistema de reinserción en las cárceles hay que trabajarlo muy bien. El hombre que entró hace cinco meses no es el que está saliendo ahora mismo. Soy otra persona, hasta en la forma de hablar. Sólo quiero abrazar a mis hijos, que han sufrido muchísimo. Espero que ahora la noticia sea esta buena", ha añadido.
Al tiempo que remacha: "Cuando uno no tiene nada que esconder, lo único que tiene que hacer es esperar a que se haga justicia. No hay indicios de nada, todo son suposiciones. Sacaron todas mis intimidades... (...) Estoy agradecido y confío mucho en la Sala".
"Más español que el jamón"
Horas antes, en la mañana de este viernes, una vez acabado el juicio, ya a puerta cerrada, los magistrados han aceptado las peticiones de la defensa de Rafael Amargo y del productor Eduardo de Santos para que ambos quedasen en libertad.
Los dos estaban en prisión desde el pasado 3 de noviembre, cuando la Audiencia Provincial de Madrid decretó que ingresara porque no habían cumplido con la obligación de firmar cada 15 días en el juzgado. La Fiscalía pide 9 años para el artista y para el productor y 6 para el tercer acusado por vender droga desde el piso de Amargo en 2020.
Los abogados de Amargo y de Santos han especificado al salir de la sede judicial que en el auto de libertad se recoge que ambos quedan libres pero deberán ir a firmar dos veces al mes en el juzgado.
Marcos García Montes, letrado de artista, ha dicho que su defendido está "encantado" con la decisión del tribunal y que confía en que la sentencia será absolutoria. Los magistrados han valorado que, una vez celebrado el juicio, no era necesario mantener a ambos en la cárcel, cuando además están en un programa de rehabilitación.
Armando Lucendo, letrado del productor, ha incidido en que mantener a los acusados en la cárcel "no tiene sentido" y que los argumentos que han esgrimido el productor y el artista "han llegado al corazón" del tribunal, por lo que ha apuntado que la futura sentencia "tiene buena pinta".
Antes de conocer esta decisión, justo antes de acabar el juicio, Rafael Amargo ha hecho uso de la última palabra para decir que seguir en la cárcel podría ser "un peligro" para él, al estar en "un ambiente poco elegante y cómodo" que podría llevarle a consumir sustancias cuando lleva cinco meses y medio sin tomar.
"Sería la destrucción para mi carrera, para mi familia y para mi superación", ha añadido, reconociendo que debió de hacer cumplido con la obligación de ir a firmar al juzgado para evitar su ingreso en la cárcel el pasado mes de noviembre.
"He pagado suficiente. Vivo en mi país, soy feliz aquí. Soy más español que el jamón serrano", ha dicho tras dedicar unos minutos a pedirle perdón a la fiscal "por unos modales que no son correctos" durante su declaración.