Hace tiempo que el cómico chileno Edmundo Bigote Arrocet (74 años) decidió no callarse más y le ha declarado la guerra en más de una ocasión a las hijas de la que fue su pareja, María Teresa Campos. Sostiene Bigote que Terelu Campos (58) y Carmen Borrego (57) han vertido falsedades sobre su persona durante y después del tiempo que duró su historia de amor con la comunicadora andaluza.
También les ha plantado cara el humorista a las hermanas Campos en relación con las cuestiones económicas que sobrevolaron su relación amorosa, y se ha defendido de las acusaciones que lo tildaban de interesado y de sólo buscar el rédito crematístico.
No sólo esto, aprovechando la delicada situación que vive Carmen Borrego con su primogénito, José María Almoguera, Arrocet concedió, semanas atrás, una durísima interviú. "A este chico -José María- le dejaron abandonado. Yo le tengo mucho cariño, ten en cuenta que he convivido con él tres años en casa de Teresita. Hasta que le echaron...", deslizó Edmundo.
Sea como fuere, las espadas están en alto entre el cómico y Terelu y Carmen. Una tensísima situación que, indirectamente, afecta a los tres hijos del humorista. En los últimos días, Gabriela y Estefanía, las dos hijas de Bigote, han salido a la palestra para defender a su progenitor. La primera llegó a aseverar en ¡De Viernes! que las hermanas Campos "amenazaron de muerte" a su padre.
Estefanía, por su parte, a través de una furibunda carta, ha manifestado: "El reino de la telebasura en el fondo está agradecido con mi padre. (...) Gracias a este circo mediático, decenas de 'colaboradores' de esta industria de la basura tienen trabajo. (...) Deberían darle las gracias por mantener engrasada la maquinaria de este negocio". Ambas, al unísono, protegen a ultranza a su padre, Bigote.
No obstante, hay un tercer hijo -en 2020 se decretó que Alexis Ledgard, el hasta entonces cuarto vástago de Edmundo, no era tal- que nada quiere saber de todo este escándalo mediático: Maximiliano Nicolás, el hijo pequeño de Bigote. Max -como lo conoce su entorno más próximo- está, de acuerdo con la información que maneja este medio, espantado.
Vive "ajeno" a todo lo que acontece en los medios de comunicación españoles -está afincado en Londres desde hace años- y "no está nada atento" a la prensa de crónica social, pero siempre termina por llegarle algún dato. Su situación personal es difícil y delicada.
No sólo porque es una persona que "calmada y muy conciliadora", sino porque durante mucho tiempo ha protagonizado una relación muy especial y estrecha con la saga Campos. Lo dejó patente en 2020, escasos meses después de que su padre y María Teresa Campos rompieran su vínculo afectivo.
"Nosotros queremos muchísimo a María Teresa y a toda la familia Campos, eso no va a cambiar para nosotros. María Teresa es una mujer maravillosa. La vida tiene estas cosas, la queremos muchísimo y ella a nosotros. Con eso nos quedamos", aseguró Maximiliano, en plena calle londinense, cuando una reportera del extinto programa Viva la vida lo interceptó. Muy educado, se mostró diplomático y cariñoso con María Teresa y sus hijas.
Con aquella manifestación, Max dejó patente que lo que hubiera pasado entre su padre y la presentadora no iba a influir en su relación con Teresa Campos y, por extensión, con las hijas de ésta. Unas palabras que ese día hicieron sonreír a Terelu Campos, sentada en el plató del programa de Telecinco. Tanto ella como Maximiliano han sido muy cautos a la hora de hablar de aquel punto final amoroso.
En la actualidad, EL ESPAÑOL no ha podido determinar cuál es la relación exacta entre Maximiliano y las hermanas Campos, pero sí puede asegurar que Terelu y Max han tenido un vínculo estrecho -de cariño- hasta hace relativamente poco. "Se han intercambiado mensajes de vez en cuando", detalla el informante.
Quién es Max
La primogénita de Edmundo Arrocet es María Gabriela. Es la única descendiente que tuvo el humorista de origen argentino durante su primer matrimonio con la actriz y presentadora chilena Gabriela Velasco. Más tarde, con la odontóloga chilena Rocío Corral, su segunda esposa, Bigote Arrocet tuvo otros dos hijos, Maximiliano Nicolás y Estefanía Triana.
El primero de ellos, que se formó en las universidades de Westminster y Bath, es un reputado arquitecto en Londres. Siendo director del estudio Amanda Levete Architects, Max se ha encargado del diseño del Museu de Arte, Arquitetura e Tecnología de Lisboa -inaugurado en 2016-, entre otros proyectos.
Por otro lado, también ha impartido clases en el máster de Innovación en Arquitectura, Tecnología y Diseño de la Universidad de Sevilla. En el terreno sentimental, Max comparte su vida con la interiorista griega Natalia Andriotis, a la que conoció durante sus años estudiantiles en Londres. Ambos se casaron en junio de 2013, en la isla de Samos, en Grecia.
Son padres del pequeño León y, en 2022, dieron la bienvenida a su segundogénito, de nombre Magno. Los vástagos de Max no son los únicos nietos de Edmundo. Gabriela también tiene otros tres hijos.