Las polémicas declaraciones de Bertín Osborne (69 años) asegurando que "hará lo que tenga que hacer" y "asumirá sus responsabilidades si tiene que asumirlas", es decir, si las pruebas de paternidad demuestran que el hijo de Gabriela Guillén (32) es suyo, ya han tenido respuesta por parte de la modelo paraguaya.
Aunque en un primer momento se ha mostrado esquiva y discreta, como suele desde que todo estalló, y caminando a buen paso -asegurando que tenía "mucha prisa"-, Guillén ha intentado hacer oídos sordos a las palabras del presentador. No obstante, ha sido al escuchar el nombre de José Luis López, conocido como El Turronero, gran amigo de ambos, cuando ha cambiado su actitud y ha lanzado varios dardos demoledores a su ex.
"Ya os lo dije una vez. O sea, no metáis a El Turronero de por medio. Es mi amigo y es su amigo. Entonces, independientemente de los dos, pues no voy a decir nada", ha puntualizado, molesta, sin aclarar si el empresario de Ubrique está mediando para que llegue a un acuerdo con Bertín.
"Siempre lo he dicho, me tratasteis de mentirosa. Yo sé quién es el padre de mi hijo, no voy a... Bueno todo el mundo, todo el mundo. Todo el mundo. Es que me parece alucinante todavía", ha añadido, dolida, sin disimular que le ha sentado mal que el cantante dice que se va a hacer las pruebas y si es el padre le va a ayudar y a cumplir con sus obligaciones: "Bueno, a ver, mi niño tiene cinco meses. ¿Ya es hora, no?".
"Esta semana he empezado a trabajar", ha declarado la joven, reafirmándose en que está sacando a su hijo adelante sola después de que Bertín Osborne dijese que ella es muy trabajadora y responsable. Así las cosas, Guillén deja en el aire si le parece raro que el presentador se muestre sorprendido cuando Europa Press le preguntó por la demanda de paternidad interpuesta por ella hace ya varios meses. "Yo sé lo que he dicho y se lo que he hecho, y ya está. Tiempo al tiempo. Tiempo al tiempo" sentencia.
El motivo de su felicidad, como confiesa, es su hijo, "que se ha recuperado y estoy muy contenta". "Estaba malito, tenía fiebre y tal, pero nada grave, nada grave" nos ha contado, desvelando que su pequeño "ya no es pequeño, está muy grande". Gabriela Guillén ha dejado entrever, entre risas, que se parecería a Bertín. "La fuerza la tiene, tiene mucha fuerza", ha confesado presumiendo de que en eso se parece a ella.
Por último, Gabriela ha querido aclarar que su lucha con el cantante de rancheras no es por cuestiones económicas porque "el dinero al fin y al cabo... Mira, es que yo no le doy ese valor que le da todo el mundo al dinero, ¿sabéis? Yo considero que hay otras cosas más importantes en la vida que el dinero".
"Yo no le pido nada, él sabrá lo que tiene que hacer en el momento que tenga que hacer. Sí, él y su conciencia... lo dirá él. Yo no voy a obligar a nadie y no he obligado a nadie", ha sentenciado, reconociendo que le gustaría que Bertín ejerciese de padre y viese al niño: "Yo estoy haciendo mi papel y es lo que importa, es que cada uno sabe lo que tiene que hacer". "Yo sé que es el padre, yo he dicho la verdad", ha zanjado, alto y claro.