El pasado martes, 14 de mayo, Rafael Amargo (49 años) vivió, qué duda cabe, uno de los días más especiales de su vida: fue absuelto del presunto delito de tráfico de drogas por el que la Fiscalía le solicitaba nueve años de prisión. Una felicísima noticia que el artista ha afrontado como una gran "bendición" en su vida.

Días después, relató en televisión el calvario que vivió privado de libertad. Ahora, se ha hecho pública una información que nada tiene que ver con esa parcela judicial que tanto dolor le ha provocado. Amargo es noticia por una gran distinción que se le ha otorgado.

Un reconocimiento o suerte de premio que ha llegado en un momento vital y clave en su existencia. Rafael se acaba de convertir en el primer artista flamenco en tener una estrella en el Paseo de las Estrellas de Las Vegas por su "brillante trayectoria e importantes contribuciones a la industria del entretenimiento". 

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"Los actores tienen su estrella en Hollywood y la gente del mundo de la música las tienen en Las Vegas", ha explicado Amargo, este pasado lunes, 27 de mayo, en el Salón de Actos de la AISGE, ubicado en el centro de Madrid.

El bailaor ha destacado, en una rueda de prensa, que, de esta forma, es "el primer artista flamenco y el cuarto español" en recibir este reconocimiento. Pablo Antonio Castro Zavala, Presidente del Paseo de las Estrellas, ha dado a conocer que fue en el año 2020 cuando los seguidores de Rafael solicitaron que se le distinguiera en ese celebérrimo paseo. 

El destino ha querido que este reconocimiento se haya aprobado cuatro años después, en 2024, y cuando Amargo ha sido puesto en libertad. Castro Zavala ha subrayado que están "muy honrados de galardonar a un personaje que ha triunfado en varios países del mundo con su talentoso espectáculo como bailaor flamenco". 

"Está Julio Iglesias, Mocedades, Camilo Sesto y yo el cuarto", ha destacado Rafael Amargo, que desvela cómo conoció la noticia: "Fue a 48 horas de darme la absolución el juez". "Me creía que era de broma porque después de cuatro años que no recibía una llamada de nadie, que en la televisión no me querían ni gratis", ha explicado el artista flamenco.

Sus proyectos de futuro

Amargo, en otro orden de cosas, ha revelado los nuevos y sorprendentes proyectos con los que confirma que está de vuelta, y que quiere pasar página tras los momentos tan duros en los que pensó que no conseguiría salir adelante.

Además de un late night que podría emitirse en Ocho televisión -aunque todavía está negociando las condiciones-, Rafael ha anunciado su debut como director teatral en una función protagonizada por su esposa y por Josele Román.

"Luciana ha estado cuatro años pendiente de mí y de cuidarme con todo este drama y se había olvidado que también es actriz y este es un premio porque merece sentirse realizada. Va sobre la gran Electra de Sófocles y lo estrenamos el 28 de junio en el Teatro La Encina", ha contado feliz por esta deseada vuelta al trabajo tras sus problemas legales.

"Estaremos ahí hasta que ahora la obra aguante, porque lo que queremos que sea una obra con continuidad, y tengo otra propuesta de una compañía importante de teatro que me ha llamado para dirigir, pero primero quiero que se estrene ésta y salga bien, porque estoy muy, muy vulnerable todavía. Con todo lo que me ha pasado, estoy ahora despertando porque metido en la vorágine no me he dado cuenta", reconoce. 

Como desvela, en su mente está "terminar su carrera" como bailaor con un espectáculo en la Gran Vía madrileña para cumplir el sueño de su padre: "Lo tendré que hacer por él porque por mí ya me conformo con mucho menos, lo de la ambición se me frenó mucho". "Poco a poco iré saliendo y me reciclaré de coreógrafo o bailaor a actor. Creo que como actor tengo una carrera muy grande por delante".

No oculta que la herida por su detención y la acusación de tráfico de drogas está todavía sangrante: "Las primeras lágrimas que me salen en 4 años han sido aquí. No he llorado, todavía no he roto. Como que no me lo creo, a lo mejor lo que tenía que hacer es llorar mar y sanar, sacarlo todo fuera. Tengo que asumirlo como un capítulo más de mi vida. Ni tengo que pedir perdón, ni tampoco tengo que dar las gracias". 

Tiene en mente tomar medidas contra los que le acusaron de ser un 'narcotraficante': "Quiero reclamar lo que tenía firmado y no he podido hacer. Una película en Bollywood que hubiera sido la entrada triunfal en Oriente medio, en el mercado ese que ningún actor lo ha conquistado. El contrato del Festival de Estambul que se quedó la gente con la entrada comprada, eso también tienen que pagármelo, esas cosas son las que voy a denunciar".

"Lo que no sabemos es si esa imprudencia de firmar viene por el tema de que soy inocente, creo que son 160 euros por cada día de cárcel, hay un dinero también he estado 156 días en la cárcel. Y estamos mirándolo con mi abogado. He sufrido mucho", ha lamentado. 

"Tengo 49 años, es una edad muy difícil para la danza. Ya no tengo el cuerpo joven ni tampoco la ilusión, eso es lo peor. No me quiero ver un tablado bailando para cuatro turistas. Ahora si me siento en una televisión gano en una entrevista para estar un año parado, para qué voy a prostituir mi arte, cuento mi vida y gano un dinero", ha admitido. 

Como desvela, le gustaría que le ofreciesen algún proyecto en televisión, como un reality para que se le vea "reír, llorar, cantar, ese Rafael Amargo que como persona no lo conocen. Supervivientes, también estaría muy gracioso en MasterChef, te puedes mear de risas conmigo. O Bailando con las estrellas, que lo he hecho en Italia, Francia y México y en España no me han llamado".

Por último, Rafa ha contado que no tiene relación con la madre de sus dos hijos, Yolanda Jiménez, porque algo "muy gordo" sucedió entre ellos. "Llevo razón para no hablarle, lo juro. Es por cosas que sabremos algún día en la vida", ha aseverado.