El divertido paseo de Adriana Abenia y su familia que termina en una guerra de agua en pleno centro de Madrid

Adriana Abenia (40 años) está viviendo uno de sus veranos más especiales. La presentadora ha tomado las riendas del nuevo programa que se emite en Aragon TV, el canal autonómico de su tierra, y en la que es la protagonista indiscutible. Se trata de Pasados por agua, una especie de Grand Prix regional que enfrenta a distintos pueblos de la Comunidad Autónoma. 

Aunque el programa continúa en emisión, ya han terminado las grabaciones después de semanas implicada en el proyecto. Han sido unos meses algo anómalos para ella, que se ha visto obligada a adelantar sus vacaciones por todos los compromisos profesionales que tiene entre manos. El destino escogido fue Ibiza, tal y como se encargó de compartir en sus redes sociales.

Ahora está de regreso en Madrid y está disfrutando de unos días en la mejor de las compañías. EL ESPAÑOL ha fotografiado a Adriana Abenia y su marido, Sergio Abad, dando un paseo por las céntricas calles de Madrid junto a su hija en común, Luna (6). 

Adriana Abenia y su familia disfrutando de un paseo por Madrid. CLIPPER PRESS

La cita tuvo lugar el pasado lunes, día 5 de agosto, en las calles del elitista barrio de Salamanca. En las instantáneas a las que ha tenido acceso este periódico en exclusiva se les puede ver muy felices y demostrando lo divertidos que son como familia y lo bien que se lo pasan juntos.

No es nada fácil permanecer estos meses en Madrid con las altas temperaturas que protagonizan el día a día, pero para ello Adriana, Sergio y Luna han encontrado la solución ideal: han mantenido una guerra de agua en mitad de la calle y a ojos de los viandantes. En lugar de utilizar pistolas de agua, la pequeña de la familia se ha apropiado de un pulverizador para refrescar a su madre y pasar un divertido momento. 

Pero no es la única que quiso pasarlo bien. En un momento del paseo, es su pareja quien también se hace con esta refrescante herramienta con la que consiguieron aliviar el calor de una tarde de Madrid. Las sonrisas ocupan cada una de las instantáneas. La última en hacerlo es la presentadora zaragozana, que también moja a su primogénita. 

Adriana Abenia y su hija durante la guerra de agua. CLIPPER PRESS

Todos ellos visten con ropa casual, cómoda y fresca. La presentadora optó por un vestido largo de rayas azules y blancas; por su parte, Luna lució un vestido corto de lazos con diferentes estampados. 

Adriana Abenia está a punto de estrenar un ilusionante proyecto del que ya ha revelado algunos detalles en su perfil de Instagram. De hecho, ha creado una carpeta de stories donde ha ido archivando cada una de las pistas. Le acompañará Nicolás Coronado (36), tal y como han compartido ambos por redes sociales. Es la productora de Lazos de Sangre, Tesseo Producciones, la encargada de las grabaciones de este programa que les ha llevado a recorrer diferentes puntos de la geografía española como Asturias, Galicia o Almería. España. 

La aragonesa está ahora viviendo un momento muy dulce en lo profesional, que se suma al buen momento personal. Lleva más de dos décadas con su razón de amor, con quien ha formado una familia muy feliz. Se comprometieron en 2013, pero no fue hasta 2015 cuando pasaron por el altar tras más de 17 años de relación. Tres años después, dieron la bienvenida a Luna, su primera y única hija. 

Adriana Abenia y su familia durante un paseo por Madrid. CLIPPER PRESS

Los problemas de salud también han marcado sus últimos años. En 2016, le fue diagnosticado un tumor en el cuello que le tenían que extirpar. Llegó a quedarse sin voz, pero con ayuda de un logopeda y mucha paciencia la recuperó. Años más tarde, le detectaron un bulto en el pecho por el que también tuvo que ser intervenida. Afortunadamente no fue nada grave.

Todos estos aprendizajes a lo largo de los años le han ayudado a enfocarse en lo que realmente le importa, dar prioridad a su familia y valorar lo bonito de la vida. Y así lo está demostrando. Es capaz de compaginar su trabajo con el cuidado de los suyos. Ahora ya sabe qué es lo realmente importante.