El pasado lunes, 26 de agosto, la familia Goyanes Lapique volvía a verse sacudida por un suceso impensable: Caritina, la hija mayor del empresario Carlos Goyanes y Cari Lapique (72 años), fallecía de forma inesperada a los 46 años a causa de un paro cardíaco. Una noticia que dejaba sin aliento a todos los que la querían, las mismas personas que hace unas horas acudían al velatorio en Marbella. 

Cari Lapique se enteraba de la muerte de su primogénita mientras disfrutaba de unos días de descanso en la vivienda de su hermana Miriam en Mallorca. Un viaje en el que la socialité estaba aprovechando para desconectar y cambiar de aires después de la muerte de su marido. Sin embargo, la viuda de Carlos Goyanes ponía rumbo de nuevo a Málaga in extremis al enterarse de la muerte de su hija.

Acompañada de su hija Carla, ambas se mostraban profundamente devastadas y rotas de dolor en la pequeña capilla de Guadalmina de San Pedro de Alcántara. Allí, familiares y amigos conocidos como María Zurita (48), Inés Domecq (41) y Eugenia Silva (48) arropaban a la familia antes del traslado de Caritina a Madrid, donde mañana, miércoles 28 de agosto, se le dará sepultura. 

Carla Goyanes y Cari Lapique, en la localidad de Marbella por la misa funeral de Caritina. Gtres

A pesar de que la misa funeral ha tenido lugar este martes, 27 de agosto, al filo de las 11:30 de la mañana, lo cierto es que entre los planes del entierro de Caritina, está previsto que sea sepultada junto a su padre, Carlos. 

Así lo ha anunciado hace unas horas Alejandra Prat (47) en el programa de Telecinco Vamos a Ver. Según la periodista, será mañana, a las 14 horas, cuando se celebre la misa de su entierro en la iglesia del tanatorio de La Paz en Tres Cantos, Madrid. Allí se enterrarán sus restos mortales junto a su padre, por decisión de su madre.

Alejandra Prat era una de las amigas más íntimas de Caritina Goyanes y la noticia de su repentino fallecimiento le ha causado tantos estragos que no ha podido ser capaz de terminar de dar la información sin romper a llorar.

Caritina Goyanes, en el funeral de su padre Carlos. Gtres

Ha sido la también colaboradora del formato televisivo, Isabel Rábago (50), quien ha tenido que tomar el relevo a Prat. Isabel, también algo conmocionada por la trágica situación, añadía que Antonio Matos había sido quien había delegado esa responsabilidad en su suegra. "Mi pensamiento va hacia Cari Lapique. Las imágenes son devastadoras", sentenció Rábago. 

La hija mayor de Cari Lapique moría de la misma forma y en la misma vivienda de Málaga que lo hacía su padre, Carlos Goyanes, 19 días antes. Ahora, el cuerpo de la empresaria será trasladado a Madrid para ser sepultado junto a su padre. Las cenizas de Goyanes permanecían en la casa de Marbella hasta ahora, cuando están viajando a Madrid junto a los restos mortales de su primogénita. 

El dolor de Cari Lapique 

Cari Lapique, el pasado 8 de agosto durante el funeral de su marido, Carlos Goyanes. Gtres

Si bien la pérdida de Caritina Goyanes ha supuesto un durísimo golpe en el seno de la familia Goyanes Lapique, lo cierto es que el dolor de Cari es inmenso, pues en menos de 19 días ha tenido que decir adiós a su marido, su cuñado -Tito Goyanes- y su hija. Una situación que está resultando muy difícil de procesar según su entorno más íntimo. 

Además de a una madre, Cari, y una hermana, Carla, Caritina deja desolados a lo que para ella ha sido toda la vida lo más importante: su marido, Antonio Matos, y sus hijos, Pedro (13) y MiniCari (10). De hecho, el ya viudo de Caritina no ha sido apenas capaz de articular palabra durante el velatorio en Marbella, mostrándose roto y arropado por sus familiares y amigos cercanos.