No están siendo unos días fáciles para la familia Pombo. Fue el pasado domingo, 1 de septiembre, cuando Marta Pombo (32 años) dio a luz a sus mellizas, María y Candela, antes de lo previsto y se convertía así en madre por segunda vez junto a su marido, Luis Zamalloa (30). 

Aunque parecía que todo iba según lo previsto, la influencer y su pareja no tardaron en recibir una noticia difícil de digerir: Candela tenía que ser trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos por problemas respiratorios que requerían de una mayor atención médica. 

Cuatro días después de dar a luz, tanto Marta como María eran dadas de alta. Una de las pequeñas tenía que continuar en observación para la realización de más pruebas que confirmasen que todo estaba bien. La empresaria se ha encargado de relatar con sus seguidores todos los avances. Y este lunes, 9 de septiembre, por fin ha recibido la mejor de las noticias: Candela ya podía marcharse a casa

[Marta Pombo y su hija María reciben el alta, pero Candela se queda en el hospital: "No sabéis lo difícil que ha sido"]

Marta Pombo junto a sus dos hijas mellizas.

La hermana de María Pombo ha utilizado su perfil de Instagram para comunicar que las mellizas volvían a estar juntas después de unos días separadas. Una imagen en la que se puede ver a las pequeñas agarradas a las manos de sus padres y un escueto texto: "Por fin". Minutos después, ha sido Luis quien ha compartido la primera imagen de las pequeñas juntas y donde se puede ver lo diferentes que son: "Respito tranquilo viendo que ya están juntas... Son el sol y la luna". 

Estos últimos días, Marta se ha sincerado con los usuarios de las plataformas sobre cómo estaba viviendo todo este proceso. Reconocía que estaba siendo "agotador" y que incluso se llegaba a sentir "mala madre": "Siento que no les estoy dedicando a Matilda y a María el tiempo que necesitan. Me mata de la pena. Zama y yo somos muy buen equipo, está aquí todos los días con ellas jugando, haciendo todo lo que puede para que se note lo menos posible en casa esta situación. Estoy deseando borrar esta semana de mi cabeza, quedarme con lo bonito que fue el parto y borrar esta semana, empezar de cero como un parto normal".

Tal y como se había encargado de anunciar en su perfil, estaba previsto que si todas las pruebas salían según lo previsto, la pequeña pudiese salir del hospital este lunes tras ocho días ingresada en los que ha permanecido en una incubadora y donde le han realizado numerosas pruebas médicas. 

Marta se ha trasladado todos los días al hospital para estar cerca de su pequeña. Fue este domingo, 8 de septiembre, cuando se le pudo ver más esperanzada y con muy buenas noticias: "Candela está muy bien, está monísima y está fuera de la incubadora. Solo estamos esperando a que acabe el ciclo del antibiótico que empezaron a darle. Acaba mañana". Y así ha sido. 

Además de los problemas de respiración, también ha que sumar que la pequeña no comía. Por precaución, los médicos prefirieron confirmar que estaba todo bien antes de dejarle ir a casa. "Es todo supernormal y dentro de las cosas que le pueden pasar a un prematuro, pero prefieren dejarla ingresada para que esté todo fenomenal".