El pasado mes de agosto, Sara Carbonero (40 años) se convirtió en protagonista inesperada después de que se hiciese pública la noticia de su ruptura con Nacho Taboada (36).
La periodista, siempre discreta en lo que respecta a su vida personal, quiso aclarar en Espejo Público la realidad y aseguró que continuaba su relación con el músico zaragozano. EL ESPAÑOL pudo confirmar en aquel momento que la pareja había atravesado varias crisis en los últimos meses.
Este martes, 10 de septiembre, Sara Carbonero reapareció por primera vez después de un verano cargado de viajes y compromisos profesionales solidarios. Lo hizo en la inauguración de la exposición "Pedro del Hierro. Del maestro a la marca", en el museo Lázaro Galdiano de Madrid con motivo de la celebración del 50 aniversario de la firma de moda.
Su presencia no estaba confirmada, pero generó un gran revuelo entre los medios de comunicación allí presentes. Tal y como pudo presenciar EL ESPAÑOL, la comunicadora llegó acompañada de otras tres mujeres, entre las que se encontraba Marie Castellví, directora general de Tendam en España.
Intentó pasar desapercibida y mantener un discreto segundo plano. Sin embargo, no dudó en saludar a compañeros de profesión con los que mantiene una estrecha relación. Llegó minutos antes que su gran amiga y socia, Isabel Jiménez (42), y permaneció atenta a cada uno de los movimientos de la presentadora de Telecinco.
Desde la distancia, Sara Carbonero apoyó a su amiga en el photocall, por el que evitó pasar a pesar de las insistentes peticiones de la prensa allí presente. Una vez Isabel terminó las sendas entrevistas que dio, se dirigió directamente a su compañera y ambas se fundieron en lo que pareció un interminable abrazo.
Tal y como ha podido saber este periódico, la expareja de Iker Casillas se encontraba algo "cansada" y recuperándose todavía del viaje que realizó con UNICEF a Panamá hace solo unas semanas. En unas declaraciones posteriores al cóctel, confirmó que también estaba contracturada de la espalda.
Después del paso por el photocall, ambas accedieron a posar juntas y hacer unas declaraciones ante los micrófonos de Pedro del Hierro. Finalmente, también atendieron al resto de agencias de comunicación. Juntas se dirigieron hacia el espacio donde está organizada esta exposición y visitaron cada uno de los espacios en el que se hace un recorrido por los 50 años de la firma.
Aunque Sara Carbonero, que tan solo acudía al evento para apoyar a su amiga y a la marca, no pudo evitar que las cámaras le esperasen a la salida del mismo. "Ha sido una visita rápida, hacer acto de presencia y saludar a la gente de la marca. Poco más", aseguraba a Europa Press.
Tras estas declaraciones, se vivió un momento tenso entre las amigas. Isabel le preguntó a Sara una de las cuestiones de las que había tenido que hablar en el photocall: el supuesto cambio de apellidos en sus hijos. "¿Tú ahora a tus hijos les pones Carbonero en vez de Casillas?". De manera tajante respondía: "Es que no quiero hablar de mis hijos".
Por el contrario, tal y como recoge Europa Press, Isabel Jiménez sí que hizo un comentario sobre este supuesto cambio de apellidos en lo que respecta al fútbol: "He estado con ellos esta semana, de hecho ayer me trajo unas zapatillas sa casa para mis hijos porque estaban nuevas que ponen Lucas Casillas. Hasta lo que yo se y los vídeos que me enseña de los parones de Marín, yo juraría que pone Casillas. Vete tú a saber, ya sabes tú estas cosas como son".
Tampoco quiso hablar del punto en el que se encuentra su relación con Nacho Taboada y sólo respondía con un escueto: "Todo está bien". Por el momento, la pareja no se ha dejado ver después de saliese la información de la crisis que habrían atravesado. No está siendo una temporada fácil para Sara Carbonero, que también tiene que acompañar a su madre Goyi en su enfermedad.