Fue a mediados del mes de junio cuando la tranquila y serena vida privada del actor Eduardo Noriega (50 años) sufrió un importante seísmo mediático cuando una historia del pasado cobró vigor e intensidad: un polémico y presunto caso de paternidad que afecta de lleno al intérprete de cintas de la talla de Tesis y Abre los ojos. 

Un hombre, de 88 años entonces -hoy, tristemente fallecido-, llamado Juan Canal, volvía a los tribunales para hacer valer su verdad: decía ser hermano de Eduardo Noriega. Batalló con denuedo y justo cuando el caso estaba a punto de llegar al Tribunal Constitucional, Canal falleció el pasado mes de agosto. Hoy, sus tres hijos, que viven en Florida, Estados Unidos, seguirán su lucha.

EL ESPAÑOL conoce que Canal "dejó muy bien dichas las cosas" que quería que sus hijos hicieran. La más importante: defender su honor y el de su madre. Tras su deceso, hay importantes novedades en este caso que, a priori, tiene muchos visos de perdurar. Siguiendo la línea argumental que inició Canal, éste aseveró ser el hijo de Pío Noriega, padre del actor, un empresario que hizo gran fortuna en Cuba.

[Muere Juan Canal, el supuesto hermano de Eduardo Noriega, a los 88 años de edad y en mitad del proceso judicial]

Juan Canal, durante su intervención, meses atrás, en el espacio 'TardeAR', en Telecinco. null

Este hombre relató en vida que su madre, Inés, trabajaba de asistenta en casa de los Noriega y que ella mantuvo una relación, fugaz pero fructífera, con uno de los hijos, PíoEl padre de Eduardo Noriega entonces tenía 19 años e Inés36. De aquella suerte de affaire -no fue más que eso y la relación no perduró- nació un niño: él, Juan. Ahí se desencadenó una historia cuanto menos truculenta. 

Más tarde, el padre de Eduardo Noriega inició otra historia de amor con una mujer llamada Marina Roiz, y en nombre de ese romance nació otro vástago, al que se bautizó como José Pío.

Aquel amor naufragó y, finalmente, Pío Noriega contrajo matrimonio con María Teresa Gómez, su única y última esposa con la que trajo al mundo a siete hijos, siendo Eduardo Noriega el más pequeño. Pasados los años, Juan Canal fue informado por su madre de quién era su verdadero padre y comenzó su lucha por ser reconocido. 

Se ayudó Canal de la mano profesional del letrado Fernando Osuna, pionero en este tipo de reclamos de paternidad. La primera vez que Juan se enroló con la Justicia en aras de ser reconocido como vástago de Pío Noriega fue hace 30 años. En aquel entonces, al no existir entonces la prueba de ADN se cerró aquel procedimiento y nada se pudo demostrar.

Eduardo Noriega en un acto público en Madrid, en noviembre de 2017. Gtres

No obstante, de la mano de Osuna, Juan Canal comenzó de cero y, en primer lugar, contactó con José Pío, el segundo hijo que tuvo el padre de Eduardo Noriega antes de su matrimonio, y éste accedió a someterse a las pruebas de ADN.

Quiso José ayudar a su hermano de padre y el resultado arrojó una coincidencia de parentesco del 99,9 por ciento. "El resultado de las pruebas ha sido que somos hermanos y que él es hijo del mismo señor que yo, pero el juzgado alega que no existió la prueba de ADN, por lo que se cerró el juicio", comentó Juan Canal, hace unos meses, en TardeAR.

"Yo no quiero nada que no sea mío, que no sea de mi progenitor, pero tiene que haber justicia. Porque mi padre se portó muy bien conmigo cada vez que nos vimos", agregó. "Busca la filiación, la condición de hijo", apuntaló Osuna en EL ESPAÑOL. Informó el letrado que el caso de filiación estaba entonces en la Audiencia Provincial de Santander y no se descartó llegar, incluso, al Tribunal Constitucional.

Entonces, llegó el fallecimiento de Canal, acaecido el pasado 18 de agosto, domingo. El presunto hermano de Eduardo Noriega perdió la vida en la localidad asturiana de Colombres, por causas naturales. Hoy, con sus vástagos al frente del litigio, Fernando Osuna anuncia relevantes movimientos: finalmente, el caso de paternidad de Juan Canal ha llegado al Tribunal Constitucional. 

"Hemos presentado recurso de amparo ante el Constitucional por infracción de derechos constitucionales. Nos basamos en que la verdad jurídica o biológica es más importante que la cosa juzgada o la prohibición de repetir un juicio", aporta Fernando, y añade: "Habíamos pedido la nulidad del auto en la Audiencia Provincial de Santander, que decía que la cosa estaba juzgada. La Audiencia dijo que no era nulo el auto".

La reacción de Eduardo

Osuna informó, el pasado mes de junio, a EL ESPAÑOL que Eduardo Noriega se tomó "mal" la existencia de su supuesto hermano. "No existe relación entre ellossólo a través de los abogados", apostilló el letrado, antes, claro está, de que se produjera el triste desenlace de Juan Canal. El entorno del actor prefiere ser prudente ante esta cuestión, tan sólo desliza a este periódico: "Eduardo y todos siguen con su vida, en nada les ha afectado". 

Poco amigo de la crónica social, el intérprete protagoniza una vida privada alejada del foco. Se casó en secreto en 2011 con la mujer de su vida, su razón de amor, Trinidad Oteros, con la que tiene una hija que nació tres años más tarde de aquel 'sí, quiero'.