Llenar un WiZink Center o un Palau Sant Jordi no es baladí. Y Dani Fernández (32 años) lo sabe muy bien. Desde sus inicios en el grupo Auryn, el cantante siempre ha tenido claro que, a pesar de ser un mundo complicado, la música era lo único a lo que quería dedicarse.
Ahora, con más de 10 años de trayectoria profesional a sus espaldas, Dani está de enhorabuena porque sus canciones siguen llegando al público y eso le ha llevado a colgar el cartel de 'sold out' en los dos estadios más importantes de nuestro país.
Toda una serie de éxitos los que ha consagrado el manchego que le han llevado a formar parte de la cena de nominados de LOS 40 Music Awards una vez más. En esta ocasión, Barcelona ha sido la ciudad escogida para acoger la velada y hasta allí se ha desplazado EL ESPAÑOL, que ha tenido la oportunidad de charlar largo y tendido con el cantante sobre su posición actual en la industria musical, además de sus miedos en este mundo.
Una vez más, invitado a la cena de nominados de LOS 40, ¿cómo se vive esto?
La verdad que muy contento, muy tranquilo, porque al final estoy rodeado de muchos amigos, mucha gente que quiero y es una noche muy esperada para mí. Llevo muchos años viniendo y me siento como en casa. Además, que sea en Barcelona es todo un plus.
Cada año cuenta con su propia temática. En esta ocasión es La música nos hace viajar, ¿dónde le lleva este lema?
Qué te voy a decir. Me paso la vida en la carretera con mi música yendo de concierto en concierto. Me encanta que hayan elegido este lema porque siento que me representa muchísimo.
Se pasa la vida en la carretera pero ha cortado el cartel de sold out en el WiZink Center con su nueva gira, ¿cree que todo el esfuerzo tiene su recompensa?
Venir a sitios tan grandes como el WiZink o el Palau Sant Jordi es increíble. Son lugares emblemáticos que parece fácil decir que los he llenado, pero que me digan que se llena me hace sentir querido por el público. Pienso que es muy difícil que la gente pague para seguir viendo conciertos.
Hay muchos artistas, mucha gente, me siento muy orgulloso de mí y de mi equipo también. Al final es un trabajo de mucha gente, ya no solo mío, entonces ojalá esto no solo se quede aquí y sigamos compartiendo música en recintos tan bonitos.
En este último álbum, La Jauría, le hemos visto ser muy sincero sobre sus sentimientos. De hecho, su último single narra la locura por una persona a la que amas. ¿Por quién se volvería loco Dani Fernández?
Por la música, por mi hija, por mi familia, por mis amigos, por mi gente y por mi pareja. Al final yo intento siempre ser una persona muy transparente, no me gusta vestirme o caracterizarme de algo que no soy. Me considero una persona muy transparente y creo que en la música al final eso se ve, así que espero que la gente se lo sienta, porque creo que es muy importante de cara a un artista que se deje de disfrazar y muestre lo que es él verdaderamente.
¿Cree que eso se aplica en la actualidad y hay artistas que se disfrazan de alguien que no son?
Al final yo hablo de mí, realmente me tendría que meter en la piel de cada uno para poder saber si realmente se está caracterizando. Para mí es muy difícil disfrazarme y hacer canciones que no hablen de mí porque lo considero algo antinatural, entonces es lo que intento hacer, sacar mi corazón y sacar lo que yo siento. Es verdad que me gusta admirar a artistas que lo hacen, pero claro, para poder ver quién no lo hace, me tendría que meter en la piel de cada uno y por supuesto no soy yo quién para hablar de eso.
Está claro que el mundo de la música tiene muchos pros, pero a la vez aspectos negativos. Si alguien de su entorno le dijera que se quiere dedicar a la música, ¿qué le diría?
Que lo deje. Inmediata y directamente. Si tengo que dar un consejo a alguien que quiero es que lo deje y, si no lo hace, eso quiere decir que está muy preparado para decirse a esto. Al final, estamos hablando de un mundo que es a prueba de balas. Se viven muchas desilusiones y muchos noes, por lo que es importante que tenga ganas e ilusión por dedicarse a esto y no lo haga por las ganas de ser famoso y ganar mucho dinero. Es imprescindible que le tenga respeto a este mundo porque yo lo tengo y, a partir de entonces, yo creo que te va a ir bien.