Las rupturas nunca son fáciles y más si estas son públicas y mediáticas. Eso es lo que le ocurrió, precisamente, a Gerard Piqué (37 años) y Shakira (47). En el momento en el que decidieron poner punto final a su historia de amor después de más de 10 años de relación, la expareja comenzó una guerra que acabó convirtiéndoles en los protagonistas de los titulares de medio mundo.
Las indirectas por parte de la artista en sus nuevas canciones y las respuestas del exfutbolista dejaron claro que la ruptura no había sido ni mucho menos amistosa y que estaban en un punto en el que las posturas parecían no llegar a un entendimiento. Todo esto se agravó al conocerse la nueva ilusión del también empresario con la que hasta ese momento era una desconocida: Clara Chía (25).
Pese a todo, Piqué siempre ha preferido mantenerse algo alejado y evitar hablar públicamente de la ruptura, de su familia y de esta nueva relación. Hasta ahora. En una entrevista concedida a la CNN, el catalán se ha sincerado sobre su situación personal y ha confesado cómo vivió toda esta polémica en la que se vio involucrado.
"Siempre he estado muy tranquilo. Sé en el mundo en el que vivimos. Sé que a todo el mundo le gusta opinar y tener su punto de vista de las cosas. Los medios de comunicación controláis un mensaje y, en líneas generales, cada uno dice lo que quiere vender", comienza a explicar el exfutbolista.
Y ha querido ser tajante en lo que respecta a lo que se ha estado diciendo de él: "La verdad o lo que ha pasado o sucede no está contado de la manera que ha sido. Esto yo no lo puedo controlar. Siempre he creído que lo mejor es que al final esté rodeado de los míos, de mi familia, mis amigos, de las personas que de verdad te conocen. Saben cómo eres y lo que haces y eso me da mucha tranquilidad".
También ha querido expresar públicamente cómo se encuentra en este momento de la vida. "Estoy feliz, me lo paso muy bien y me siento un privilegiado. La vida que he tenido, poder jugar en el club de mi vida, unos hijos maravillosos, una familia increíble, unos amigos de toda la vida... Veremos qué me depara el futuro y disfrutar de la vida, que al final esto dura dos días y tenemos que disfrutarla", sentencia.
Estas palabras llegan en uno de los mejores momentos profesionales de Shakira, teniendo que readaptar su gira en Estados Unidos por la alta demanda de las entradas para los conciertos programados. Parece que ahora la situación entre ambos nada tiene que ver con lo que era hace unos meses, pero todavía quedan algunas heridas que el tiempo no ha conseguido sanar.
Pese a todo, ambos están muy concienciados con la educación y el bienestar de los dos hijos que tienen en común: Milan (11) y Sasha (9). Los pequeños han cambiado de vida en los últimos años y ahora residen, junto a la colombiana, en Miami. Hasta ahí se desplaza con frecuencia el exfutbolista para disfrutar de tiempo en familia.