El pasado 25 de octubre se estrenó la tercera temporada del documental de María Pombo (30 años). Con la figura de la influencer como hilo conductor, los cuatro episodios nuevos vuelven a poner el foco en sus vivencias familiares, más allá de su trabajo como empresaria y creadora de contenido. Así, uno de los temas que aborda es su matrimonio con Pablo Castellano (37), quien destaca especialmente, respecto a las temporadas anteriores, como personaje protagonista. 

Aunque siempre ha sido un personaje relevante en la historia, pues es el marido de María Pombo, esta vez, Pablo Castellano habla como nunca de su vida personal. Por un lado, el empresario relata cómo vivió la separación de sus padres y, posteriormente, la muerte su progenitor. Por otro, junto a la influencer, se sincera sobre la crisis que vivieron en su matrimonio y el apoyo que han encontrado en una terapeuta. 

Respecto a Pablo Castellano, también se pone el foco en el cambio de imagen que ha experimentado este último año. Un nuevo estilo, tanto en la forma de vestir como en el peinado, que EL ESPAÑOL analiza de la mano de la mano de expertos en moda. 

"El cambio de imagen de Pablo Castellano ha sido un acierto absoluto", asegura a este periódico Jesús Reyes, periodista, experto en moda y estilista. Sobre la evolución del marido de María Pombo en términos estilísticos, el también autor de Leonor. Estilo de una Borbón y Ortiz, señala: "No solo sigue las tendencias actuales, sino que también refleja madurez y sofisticación". 

Mónica Delgado, estilista, asesora de imagen y experta en psicología del color tiene la misma percepción. "La imagen de Pablo Castellanos ha sido un acierto del cien por cien", indica. "Transmite jovialidad, frescura, con acentos de chico inconformista y aventurero, ya que a la hora de vestir mantiene su estilo casual buscando la comodidad en sus outfifs", analiza la experta respecto al nuevo look del empresario. Ahora, añade, el marido de María Pombo se ha arriesgado a "introducir algunas prendas innovadoras que hacen que su imagen sea más atrevida y desenfadada de lo que nos tenía acostumbrados". 

Delgado también pone el foco en el corte de pelo que se hizo el empresario el pasado febrero y que ha mantenido durante los últimos meses. Fue entonces cuando Pablo Castellano mostró en sus redes que volvía a su melena corta después de ocho años. 

"Antes de cortarse el pelo, su imagen transmitía tradicionalidad, formalidad... La de un chico precavido, cumplidor...", recuerda la asesora de imagen. Sobre su nuevo look, puntualiza: "Siempre fiel a su estilo, actualmente despierta atrevimiento y empuje". 

Este periódico también se ha puesto en contacto con los expertos de Alfaparf Milano Professional, conocidos por su enfoque en la personalización y en la salud del cabello, quienes aprecian "cómo el corte parece pensado para resaltar los rasgos de Pablo, logrando un equilibrio entre elegancia y naturalidad". Los estilistas de la citada marca también valoran la textura y la estructura del corte, destacando su versatilidad. Explican que este cambio es "una muestra y ejemplo de cómo un corte bien ejecutado, junto con el uso de productos profesionales, potencia la imagen personal sin mucho esfuerzo diario". 

Pablo Castellano ha logrado una imagen renovada gracias a la asesoría de una estilista personal, que también aparece en Pombo, de Amazon Prime. Se trata de Ana Verdasco, hermana del tenista Fernando Verdasco (40) y, por consiguiente, cuñada de Ana Boyer (35). 

En el documental se muestran algunas escenas de Pablo junto a la estilista en plena asesoría. Es ella -en ocasiones con la aprobación de María Pombo- quien le sugiere determinadas combinaciones y prendas, tanto para el día a día como para aquellos compromisos profesionales que lo obligan a situarse frente a las cámaras. 

El papel que ha jugado Ana Verdasco en la renovada imagen de Pablo Castellano ha sido fundamental y así lo confirman los expertos en el sector contactados por este medio. "Este tipo de transformación muestra cómo la moda y el estilo pueden influir positivamente en la percepción pública y en la identidad de una persona. Cuando un profesional como una estilista se involucra, se nota la diferencia: la imagen se vuelve más coherente, más pulida, pero sin perder la esencia del individuo", asegura Jesús Reyes. 

Mónica Delgado sostiene la misma opinión: "Ponerse en manos de un estilista profesional ha sido un éxito absoluto, ya que su imagen ha impactado de manera positiva restando años a un chico joven que no le sumaba una imagen tan tradicional". La experta añade que gracias a la asesoría de una experta, el empresario ha podido "encontrar una coherencia con su imagen actual y su personalidad activa". 

Para terminar, Delgado también se hace eco del cambio que ha experimentado Pablo Castellano en lo que a su comunicación se refiere. Un punto clave que viene de la mano de su actual estilismo. "Ha generado un impacto muy positivo en él y eso se trasmite en cómo se siente. Lo refleja", concluye.