El cómico Miki Nadal (56 años) y su exmujer, y madre de su primera hija, la deportista olímpica Carola Escámez, no están atravesando, precisamente, por un momento plácido y sosegado. En realidad, desde que firmaron el divorcio en 2019, su relación no ha vivido tiempos de gran cordialidad.
Si bien en un inicio se procuró que las relaciones fueran buenas por el bien de Carmen, su única hija en común, Miki y Carola no lo han conseguido. Las desavenencias entre las partes suman y siguen, y no conocen tregua. El pasado mes de agosto todo estalló por los aires.
Se acabaron las sutilezas. Carola dijo basta cuando Helena Aldea (37), actual pareja de Nadal, publicó en su red social unos mensajes que azuzaron las brasas de la guerra. En el escrito, Helena le decía a su amor, Miki: "Lidias con situaciones provocadas por una maldad huérfana de inteligencia".
Unas palabras, un tanto crípticas, que la otra parte, Escámez, entendió como una provocación, y emitió la deportista olímpica un escrito demoledor. El pasado 1 de noviembre, EL ESPAÑOL conoció, además, que el entorno de Carola interpretó como "burla" un vídeo que colgó Nadal.
En ese material audiovisual, se puede ver cómo el humorista y colaborador de Zapeando simula, en clave de humor, hacer deporte, en referencia -siempre según lo trasladado a este diario- a Roberto Martín, marido de Carola, entrenador personal de profesión.
En este convulso trance, este periódico ha conocido, en exclusiva, que Miki y su exmujer se verán las caras en el juzgado. El motivo no es otro que la manutención de su hija en común. El juicio tendrá lugar este miércoles, 4 de diciembre, a las 13 horas, en los Juzgados de Familia, situados en Madrid, en la calle de Francisco Gervás.
Conviene matizar que la custodia de la menor es compartida. Así se decretó tras el quiebre sentimental. Según ha podido conocer EL ESPAÑOL, este litigio que libran Miki y Carola encuentra su detonante el pasado mes de agosto, cuando fallece la madre de Escámez. En ese momento, Miki interpone una demanda contra la madre de su primogénita.
En ese requerimiento, así se hace constar a este medio, el cómico solicita en cuanto a los gastos de Carmen que la madre de ésta sufrague el 70 por ciento de los mismos, y él, Miki, un 30. No sólo esto, el artista, además, pide que Carola descubra la cantidad que ha percibido como parte de la herencia tras la muerte de su madre.
Dicho de otro modo, quiere Miki que ella aporte el testamento de su progenitora. En ese momento, la parte letrada de Miki Nadal comienza a negociar con el abogado de Escámez, pese a la demanda inicialmente interpuesta. Se detalla que son dos las posibles soluciones que propone el letrado de Carola -la deportista ha declinado hacer declaraciones cuando EL ESPAÑOL la ha contactado-.
Se plantea, en un primer acuerdo, que Escámez afronte el 100 por 100 de los gastos de Carmen, quedándose ella la custodia completa. Eso sí, permitiéndole a Miki ver a la menor cuando él lo desee, firmando el acuerdo pertinente. Ante la negativa de la otra parte, se trata de alcanzar otro consenso: en éste, cada uno paga el 50 por ciento de la manutención.
Además, en este 50-50, ambas partes se comprometen a responder con sus obligaciones -no sólo monetarias, también de responsibilidad en lo que respecta a otras actividades, como estar presentes en las actividades extraescolares y cumplir con lo que establece la custodia-.
Tampoco se alcanza un entente. Y ésta es la razón por la que este miércoles, día 4, Miguel -como lo conoce su entorno- y Carola se verán las caras ante el juez. Habrá que esperar para conocer la última palabra de la justicia. Explica el entorno de Escámez que ella nunca ha buscado guerra alguna con el padre de su hija: no va en su carácter.
Sólo anhela Carola ser feliz y vivir en paz al lado de su razón de amor, Roberto Martín. Rober, como lo llaman los suyos, tampoco lo está pasando bien. Tal y como conoció este diario hace unos días, Martín es un hombre que se dedica a su profesión, y sufre y se enfada tan sólo en la medida en que lo hace su esposa.
La tensión entre Miki y su exmujer viene de lejos. En concreto, desde junio de 2019, año en que ambos anunciaron su separación. Miguel y Carola se separaban tras cinco años de matrimonio. Entonces, se arguyeron diferentes motivos para entender aquel quiebre sentimentales que pocos esperaban.
Sea como fuere, más allá de esta cuestión, lo verdaderamente bélico llegó a continuación: Miki fue condenado por un delito de "vejaciones leves" a su entonces esposa. La condena la falló Pedro José Arduán Rodríguez, el titular entonces del Juzgado de Violencia sobre la mujer número cuatro de Madrid.
El tiempo pasó y tanto Miki como Carola supieron rehacer sus vidas. Él, junto a la madre de sus otras dos hijas, Helena Aldea; y Escámez, ídem en los brazos del hombre que le ha devuelto la ilusión, Roberto. Junto a él, Carola ha vuelto a ser madre de una niña llamada Covadonga.
El vídeo de la "burla"
Finales del mes de octubre. Miki Nadal decide una mañana grabarse un vídeo, un polémico material audiovisual que, tras publicarse, agitó aún más la contienda. Hay que matizar que Martín, marido de Carola, es entrenador personal y acostumbra a compartir en sus redes sociales su rutina deportiva, sus entrenamientos.
Rober se graba vídeos para ayudar a los demás. Forma parte de su trabajo, más bien se diría de su devoción por su profesión. Pues bien, Nadal hizo lo propio en su red social: grabarse a sí mismo simulando estar en pleno ejercicio. Tirando de ese humor que tanto practica en el desarrollo de su profesión.
"Otro día más de entrenamiento completado. Ha sido 12 series. Luego me he recorrido otros cuatro kilómetros a fuego, a una media de 340 cada kilómetro y ahora me voy a hacer unas pesitas, hora y media. Mentira. Me voy a pasear un rato y con suerte no me tuerzo el tobillo. Venga, hasta luego", son las palabras que entona Miguel.
Este material se entendió desde el entorno de Carola como una suerte de "burla" en forma de "imitación", un ataque personal. "Hablan porque saben que siempre guardo silencio, como todos estos años. Hablan porque saben que estaré callada por respeto a una menor y juegan con esa baza", manifestó, semanas antes, Carola, en una furibunda carta.