Los pasados meses de septiembre y octubre marcaron un antes y un después en la Familia Real española. La difusión de unas comprometedoras fotos de la vedette Bárbara Rey (74 años) y el emérito Juan Carlos I (86), tomadas hace décadas y publicadas en una revista holandesa, y la posterior filtración de unos audios inéditos llevaron a numerosos medios de la crónica social a volver a abordar una historia que se creía terminada.
Una polémica iniciada precisamente por el hijo de la socialité, Ángel Cristo Jr. (43), con quien mantiene una tensa relación desde hace un tiempo. Más allá de difundir las imágenes de Bárbara con el que fuera jefe del Estado, el vástago de la vedette ha hecho de los platós de televisión este año su segunda casa, donde las críticas hacia su madre han resonado frecuentemente.
365 días después es su turno. María García García -nombre de pila de Bárbara Rey- ha dado un paso al frente y ha concedido este lunes, 9 de diciembre, una entrevista grabada en ¡De Viernes! que reescribirá la historia de España. Más de 260 preguntas sin vetar en las que la vedette se ha abierto en canal sobre su trágica infancia, los duros momentos con el padre de sus hijos, su papel como madre o el affaire con el emérito Juan Carlos.
Escuchar la historia de la infancia de una persona es imprescindible para conocer su contexto futuro. En el caso de Bárbara, la enfermedad de su madre marcó el rumbo de su niñez y próxima adolescencia. "Perdía mucho los nervios y su comportamiento era agresivo. A mi hermana la maltrató", ha confesado la vedette. Precisamente por este motivo no entiende las críticas vertidas hacia su persona por parte de Ángel Jr. "Mi infancia no ha tenido nada que ver con la de mi hijo. No entiendo que me deje de mala madre. Él y mi padre han sido los hombres de mi vida", ha apuntado.
Aunque desde siempre había tenido claro que su vocación era el mundo del espectáculo, la falta de apoyo de su familia así como oscuros episodios marcaron el rumbo de su trayectoria profesional desde los inicios. "Mi familia nunca comprendió ese trabajo. Llegué a sufrir abusos", ha sentenciado, emocionada, Bárbara Rey.
El paso de los años llevó a Bárbara a consagrarse como una de las vedettes más aclamadas de la capital en aquella época. Tanto que hasta la propia policía tenía que protegerla de los fanáticos. Sin embargo, una llamada en la primavera de 1977 lo cambió todo.
"Hola, soy el Rey". Estas cuatro palabras marcaron el inicio de una historia que, 50 años más tarde, sigue dando mucho que hablar. Frente a Santi Acosta (56) en la entrevista grabada para Telecinco, Bárbara comienza a relatar su affaire con el padre del rey Felipe VI (56 años). "Me llamó él mismo. No daba crédito. Me dio un número para que llamara a Zarzuela y era verdad", empieza relatando la de Murcia. A partir de aquella llamada telefónica, un sinfín de conversaciones diarias comenzarían a sucederse entre Bárbara Rey y Juan Carlos de Borbón.
Un mes. 30 días después de producirse la primera llamada, el rey emérito pide a Bárbara verse en persona. "Me llevó a Zarzuela. Estaba muy guapo. A él le va a gustar escuchar eso", ha apuntado. "La primera vez que nos vimos en persona me dio un medallón con todos los signos del Zodiaco. Me pidió que no me lo pusiera porque la reina Sofía lo conocía". relata al mismo tiempo que confiesa que "al despedirnos me dio un beso en la boca".
Días más tarde llegaría su primer encuentro íntimo. "Yo no iba enamorada a ese primer encuentro porque las conversaciones eran normales. Fue en una cama fea. No suena romántico. Esperaba que fuera más cariñoso, pero él no es generoso. Satisfacía sus necesidades sexuales conmigo", ha señalado. De la misma forma, ha aprovechado la oportunidad para resolver uno de los mayores enigmas: ¿estaba la reina Sofía al tanto de la situación?
"La reina Sofía sabe mejor que nadie cómo es él". Tras estas palabras, Bárbara Rey sostiene que la madre del actual jefe del Estado siempre ha sido plenamente consciente de la relación que mantenía con Juan Carlos I. "Durante un besamanos, Sofía me preguntó por mis hijos, saltándose el protocolo".
De forma paralela a sus encuentros con el rey emérito, Bárbara Rey disfrutaba junto a otros hombres. No fue hasta comienzos de los 80 cuando la empresaria encontró el "amor verdadero" junto al padre de sus dos hijos, Ángel Cristo, con quien estuvo casada durante ocho largos años.
"Después de pasar una mala racha llegó él. Un hombre que me quería y que no iba a esconder a Bárbara Rey". Tras un mes de relación, Ángel y Bárbara tomaron la decisión de pasar por el altar. "Cuando Ángel me pide matrimonio, llamé al Rey para frenar los encuentros y no volví a tener contacto con él", ha señalado la vedette.
Meses antes de darse el 'sí quiero', el que fuera Rey de España se puso en contacto con Bárbara para hacerle un regalo de boda. "Yo me cito con él y respeta mi decisión de no querer seguir manteniendo relaciones con él ahora que me caso. Es entonces cuando me regala un reloj de un barco para mi marido". Cabe recordar que Bárbara Rey nunca llegó a contar a Ángel Cristo su affaire con el monarca por temor a la respuesta del domador. "Dos cosas que le conté y me dio dos palizas. No podía contarle eso".
No fue hasta 1990, después de firmar el divorcio con Ángel Cristo, cuando Bárbara comenzó a tener de nuevo encuentros íntimos con Juan Carlos I, ya en la casa de la actriz. Unos episodios que ahora recuerda emocionada. "Me pude quedar embarazada, pero tomé precauciones. Si yo hubiera querido hacerle una faena, lo hubiera hecho". Además, la vedette ha aprovechado su altavoz en el formato de Telecinco para relatar uno de los episodios más duros de su affaire con el emérito. "Me trató como una puta. Después de hacer el amor, me dejó 500.000 pesetas en la mesilla", confiesa entre lágrimas.
Tiempo después, Bárbara Rey, sin trabajo, tomó la decisión de hacer un casting para una serie que barajaba Antena 3. De esta forma, pidió al entonces Rey de España que, en una comida que iba a tener con Antonio Asensio, propietario de la cadena, presione para que la serie se ruede. Juan Carlos de Borbón le comunicó que, finalmente, el consejo de la cadena desestimaba la serie, aunque al cabo del tiempo la vedette fue consciente de que era el exjefe del Estado quien no quería que todo esto siguiera adelante, bautizándolo como su "mano negra". Fue precisamente éste el motivo -sumado a las presiones de una amiga de la época- lo que llevó a Bárbara a grabar sus siguientes encuentros con el rey emérito.
"Vinieron a casa para instalar unos micrófonos y una cámara dentro de una tele. Yo tenía miedo, pero nunca llegó a darse cuenta", confiesa Bárbara haciendo alusión a varias de las grabaciones que acumula del emérito Juan Carlos. Entre ellas, piezas audiovisuales en las que ambos se mostraban entre risas recogiendo platos y botellas de vino.
Con respecto a las escandalosas fotografías que publicaba la revista Privé hace unos meses, Bárbara asegura que la encargada de hacerlas no fue su hijo Ángel, sino su hermana. Además, confiesa que, tras la llamada a Zarzuela reclamando dinero por ellas, la vedette entregó varias a cambio de dinero, aunque conservó muchas otras, comenzando así una especie de chantaje.
Esta sería otra ocasión más en la que la actriz reconoce haber recibido dinero por parte del exmonarca. Cabe recordar que durante una mala racha económica, Bárbara pidió a Juan Carlos I vender el brillante, un diamante de alto valor, a cambio de una compensación de dinero.
A pesar de que Bárbara esperaba que la polémica con respecto a las fotografías quedara disipada tras su entrega, lo cierto es que tiempo después tuvo que hacer frente a uno de los momentos más complicados de su vida. "Mientras yo no estaba en casa aprovecharon para abrir la caja fuerte. Me rompieron la correa de la dirección del coche para perder el control del vehículo. Me querían matar".
El segundo chantaje estaba por llegar. Tal y como ha confesado Bárbara Rey, llegó a firmar un cotratato de trabajo que estipulaba un pago mensual a la vedettte de cinco millones de pesetas. "Yo no lo llamaría chantaje, lo llamaría préstamo. Y lo volvería a hacer", sentencia la actriz.
A raíz de enterarse de la existencia de las grabaciones, Juan Carlos de Borbón decide cortar relaciones con Bárbara Rey. "Es la mayor desgracia de mi vida. Lo que viví con él se llamaría hoy en día acoso, pero en su momento era amor", sentencia directa Bárbara, añadiendo que volvería a hacer todo lo que hizo sin arrepentimiento alguno.
La relación con su hijo
El último bloque de la entrevista concedida por Bárbara Rey ha estado dedicado a la turbulenta relación que mantiene desde hace un tiempo con su hijo, Ángel Cristo Jr. Un capítulo doloroso que la vedette recuerda emocionada. "Lo que más daño me ha hecho es que mi hijo me deje como una mala madre".