Ramón Calderón, abogado y amigo íntimo de Paquirri, responde a Kiko Rivera en 'Sábado Deluxe'
Fue una de las personas a las que el Dj acusó en el especial de Telecinco y se ha visto obligado a defenderse.
15 noviembre, 2020 11:18Noticias relacionadas
El pasado viernes se vivió una noche histórica con el especial que se emitió en Telecinco sobre la herencia de Paquirri. Kiko Rivera (36 años) llegaba al plató dispuesto a desvelar todo lo que había investigado estas dos últimas semanas, y lo cierto es que sorprendió la guerra que le declaró a su madre, Isabel Pantoja (64).
Si hay una persona a la que se dirigió directamente, esa fue Ramón Calderón, abogado y amigo íntimo de Paquirri. Kiko no dudó en tacharlo de sinvergüenza y aseguró que había cometido irregularidades junto con su madre. Este sábado en Sábado Deluxe se trató de nuevo la herencia del torero, y este letrado entró por teléfono para defenderse de las acusaciones que el Dj lanzó contra él la noche anterior: "Hay insinuaciones que no se puede hacer gratuitamente, yo no tengo nada que ver".
Ramón Calderón ha explicado por qué acepta velar por los intereses de Kiko Rivera a raíz de la muerte de Paquirri: "Acepto la defensa y representación de Kiko Rivera porque es el hijo de Paquirri, de un amigo, porque estaba desamparado y lo hice desinteresadamente durante tres año y no fue fácil".
Hasta el año 1987 defendió los intereses de Kiko, de ahí en adelante ya no era su obligación: "Nada de lo que ocurriera después tenía yo competencias ni podía intervenir. Fue la madre quien ostentaba la patria potestad y la representación de su hijo". Además, en el programa se trató un pequeño error que tuvo Kiko Rivera y es que la hipoteca que se pide en el año 86 con la empresa Cantora. S.A. se pide a nombre de la misma y no es algo que pida Isabel Pantoja, ya que se empresa la creó Paquirri. Un pequeño fallo que queda en nada con el engaño que ha sufrido el Dj toda su vida por parte de su madre.
Las palabras de Kiko
Kiko Rivera no solo 'disparó' en el programa Cantora: la herencia envenenada contra su madre, sino que también se atrevió a dar dos nombres más como responsables: el de su tío, Agustín Pantoja, y el de Ramón Calderón, el hombre que en 1987 fue nombrado Defensor Judicial para representar sus intereses en el reparto de la herencia de su padre. A esas tres personas, y una cuarta a la que no ha querido nombrar "por respeto", señaló con el dedo acusador Kiko Rivera como únicos responsables de los supuestos tejemanejes que se hicieron con el legado de Paquirri. Sobre Ramón Calderón, ha sido categórico: "Eres uno de los implicados y me lo vas a tener que explicar en un juzgado. Tú, Isabel Pantoja y Agustín Pantoja".
"Voy a hablar de una empresa que se llama Cantora S.A. Para esa empresa, ese año, mi madre pide una hipoteca de 50 millones de pesetas de la época. En 1986 Cantora todavía no era de nadie, porque se supone que me la deja mi padre a mí al cien por cien, pero no se ha hecho efectiva la repartición entonces. Es decir, mi madre está disponiendo de un bien que no es suyo. Moralmente, ¿cómo le haces eso a un hijo?". Y continúa relatando: "En ese momento, Cantora son nueve fincas, pero como 50 millones de pesetas parece ser que a mi madre no le eran suficientes, en 1988 vuelve a pedir, poniendo Cantora, 35 millones de pesetas más. Que son, en total, 85 millones de pesetas en dos años".
Tras esto, Kiko Rivera viaja al año 2002 en su testimonio: "Tengo 18 años. 11 de julio, Fuengirola. Se firma la cancelación de ese crédito de 85 millones que mi madre termina de pagar. En ese mismo momento, vuelve a hipotecar Cantora por un valor de 2.700.000 euros. Pero ya solo hay seis fincas en Cantora, ya no son nueve. Faltan tres que ya no aparecen. Por tanto, ¿quién ayuda a quién? Yo. Llevo hipotecado desde los dos años. Eso es imperdonable. No sé si es legal, pero es la bomba. Si yo no existiese, mi madre no tendría absolutamente nada".
En lo que respecta a los tantos por ciento en los que está dividida Cantora, Kiko explica: "¿Saben cuándo se firma ese 52 por ciento de Cantora para mi madre? En 1988. Significa que en 1988 es cuando a mi madre le dan el 52 por ciento a ella, y el 47 a mí. Por lo tanto, todo lo que se ha hecho tiempo atrás, ¿con qué permiso lo haces? Aparte de no cumplir con la voluntad de tu marido, que es mi padre".
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