El Ayuntamiento de Madrid convocó a los vecinos para definir la reforma de la Plaza de España el pasado 3 de diciembre. Un mes después, tal y como ha podido saber EL ESPAÑOL, las asociaciones invitadas se han levantado de la mesa de participación y han plantado al consistorio de Manuela Carmena. No quieren seguir formando parte de un “falso proceso participativo”, en el que han sido convocadas para generar un nuevo entorno.
El método participativo se resumía en pensar en 18 preguntas que se harán a los ciudadanos para saber qué quieren hacer con la plaza. Paradójicamente, el resultado de las opiniones de los madrileños será tenido en cuenta después de haber adjudicado el diseño mediante un concurso internacional. La opinión de los vecinos se empezará a recopilar en las próximas semanas, pero los grupos no entienden que ni siquiera se haya planteado la necesidad de un proyecto tan caro.
Estamos a favor de la participación, pero no queremos legitimar con nuestra presencia algo que ya está diseñado
Este periódico ha tenido acceso al documento firmado por Ecologistas en Acción, la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid, la Asamblea Ciudadana del Barrio Universidad, la Asociación de Viandantes a Pie, la Plataforma Salvemos el Edificio España, Madrid Ciudadanía y Patrimonio y Club de Debates Urbanos. En el escrito, los grupos lamentan que el Ayuntamiento no les haya explicado cuáles son las razones para actuar “con tanta celeridad” en un proyecto tan delicado.
Explican que el proceso de participación está dirigido y controlado. "Estamos a favor de la participación, pero no queremos legitimar con nuestra presencia algo que ya está diseñado", aseguran desde las asociaciones. Muestran su preocupación ante la falta de estudios rigurosos sobre la situación actual de la plaza a partir de los cuales tomar decisiones. “El problema principal es que nunca se planteó tener análisis de la plaza”, explican fuentes del proceso. Por eso ven absurdo que se resuelva con unas preguntas a los vecinos.
El farol de Wanda
Por otro lado, desde Ecologistas en Acción cuestionan las informaciones aparecidas en los últimos días sobre una posible marcha del grupo Wanda del Edificio España. Acudiendo a "fuentes oficiales" se ha explicado que el emporio chino abandonaría la intervención en el edificio y se insinuó con la reventa del edificio. “Es un farol para conseguir un derribo total. Conservar las fachadas durante la destrucción del interior les supone una inversión en seguridad tan alta para mantenerlas que no están dispuestos a hacerlo”, explican a este periódico.
Hasta que no haya comunicado oficial de la empresa, como hizo Sheldon Adelson en su día con el fracaso de Eurovegas, no podemos creernos nada
“Han conseguido la movilización, es una estrategia de comunicación convenida entre medios y políticos del PP y de Ciudadanos". Esperanza Aguirre aseguró ante los rumores que es un "asunto gravísmo que el grupo chino Wanda, que iba a hacer una inversión extraordinaria en un edificio emblemático, haya decidido levantar la oficina de Madrid y dejar esa inversión como consecuencia de que el Ayutamiento de Manuela Carmena no les ha dado permiso para hacer la rehabilitación desmontando la fachada".
"Hasta que no haya comunicado oficial de la empresa, como hizo Sheldon Adelson en su día con el fracaso de Eurovegas, no podemos creernos nada”, añaden. De hecho, representantes de Wanda, junto a los hoteleros, han sido las únicas partes convocadas en el proceso de participación que se han mantenido en su sitio en las reuniones, mientras las asociaciones de vecinos las abandonaban.
Participación a medias
“A día de hoy, seguimos sin tener información sobre los datos de partida que abocan a la actual corporación a poner en marcha este proceso, por lo que nos es absolutamente imposible comprender en qué medida está actuación puede satisfacer los intereses generales de los madrileños y su ciudad”, dicen. Tampoco han recibido información por parte del Área de Desarrollo Urbano Sostenible los datos que justifiquen la puesta en marcha de este proceso. “Nos es absolutamente imposible comprender en qué medida esta actuación puede satisfacer los intereses generales de los madrileños y su ciudad”.
Ecologistas en Acción fueron los primeros en abandonar la iniciativa tras la reunión del pasado lunes en Medialab Prado, en la que José Manuel Calvo, responsable del Área de Desarrollo Urbanístico, se marchó “a los cinco minutos”, sin escuchar los problemas que las asociaciones plantearon esa jornada. “No tenemos nada que hacer en ese procedimiento de participación tal y como se ha diseñado”, explica Nines Nieto de Ecologistas en Acción.
Nunca hemos tenido forma de participar: lo que plantean es una participación muy dirigida
“Lo primero que planteamos fue si el Ayuntamiento necesita una reconstrucción de una plaza para la que va a necesitar una inversión del calibre que plantea: 43 millones de euros”, asegura Nieto. Además, lamentan la falta de debate que ha propuesto el que era hasta ahora el procedimiento estrella de participación ciudadana. “Nunca hemos tenido forma de participar: lo que plantean es una participación muy dirigida”, asegura.
El próximo martes las asociaciones firmantes expondrán ante la prensa estas razones que las han llevado a abandonar su presencia. “Nos están utilizando para justificar una actuación que no han conseguido explicar por qué es necesaria”, cuentan desde la plataforma Salvemos el Edificio España. “El Ayuntamiento debería saber qué tiene que hacer en la plaza. Parece que no sabe qué debe hacer, pero que debe gastarse un pastón en ella. No se han planteado si este proyecto es necesario”, recuerda Nieto.
Salta la alarma
El escrito continúa y uno de los puntos hace alusión al control que tienen el sector hotelero sobre el proceso: “Nos alarma que los intereses no neutrales de la edificación perimetral quieran capitalizar la actuación para aprovecharla exclusivamente en su propio beneficio, en detrimento del vecindario, no midiendo las consecuencias que se deriven a medio y largo plazo para la ciudad de Madrid”. Denuncian que lo único que quieren los hoteles de la zona es ampliar aparcamientos en la plaza.
“En ningún caso nuestro objetivo es aceptar la responsabilidad que se nos traslada de preguntar a la ciudadanía, elaborando el cuestionario, cuando consideramos que los madrileños no se encuentran en condiciones de información suficientes para poder intuir las consecuencias y responsabilidades que devengan de sus respuestas”, se puede leer en el informe presentado por las asociaciones.