"A las 22.20 se ha abierto el ataúd de Salvador Dalí y se ha empezado a trabajar con los restos mortales". La información, proporcionada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, alude a los trabajos de exhumación, finalizados a las 23.40, que realiza en el Museo Dalí de Figueras la comisión judicial encargada de obtener, a petición del Juzgado de Primera Instancia número 11 de Madrid, muestras de ADN del cadáver del artista.
La prueba es esencial para resolver la demanda de paternidad interpuesta por Pilar Abel, nacida en Figueras en 1956 y que asegura ser fruto de la relación que el pintor habría mantenido con su madre, niñera de una familia de Cadaqués vecina de los Dalí.
La demanda de Abel, pitonisa y lectora de cartas del tarot, ha sido admitida a trámite por el Juzgado madrileño, cuya titular dictó el pasado 26 de junio una resolución en la que argumentó que "es necesaria la prueba biológica de investigación de la paternidad respecto de Salvador Dalí Domenech" al "no existir restos biológicos ni objetos personales sobre los cuales practicar la prueba por el Instituto Nacional de Toxicología".
Una comisión dirigida por la letrada de la Administración de Justicia del Juzgado de Instrucción número 8 de Figueras (encargado de la diligencia por exhorto del Juzgado de Madrid) está supervisando los trabajos que se realizan sobre el cadáver de Dalí.
La comisión, de la que forman parte dos forenses, la coordinadora del Instituto de Medicina Legal de Gerona y un técnico de auxilio, comenzó a trabajar este jueves una vez que el museo cerró sus puertas al público.
Tras levantar la lápida de una tonelada y media de peso, a las 21.45 horas se sacó el féretro del interior de la tumba. A partir de ese momento los cinco miembros de la comisión judicial son las únicas personas que se encuentran en el interior de la zona de trabajo.
Una vez abierto el féretro, el cadáver ha sido manipulado con todas las medidas de asepsia y protección necesarias para que las muestras que se recojan no se contaminen y queden aseguradas su autenticidad y fiabilidad. La letrada de la Administración de Justicia dará fe de que los restos que serán contrastados con el ADN de Pilar Abel corresponden al pintor.