Robin Williams llega a contar el plan que tenía en su cabeza ese 11 de agosto de 2014, y el público hubiese caído en carcajadas una vez más. En unos días se cumplen cuatro años desde que el cómico favorito de Hollywood decidiera colocarse una soga al cuello y ahorcarse en su casa de Tiburón (California). Solo, en silencio, sin risas -ni enlatadas-.
HBO ha estrenado en su plataforma un documental bautizado como 'En la mente de Robin Williams' sobre la cara oculta de la vida del ganador de un Oscar. Las drogas, las mujeres y la comedia fueron las grandes adicciones de su vida. A Williams le perdían las mujeres y los aplausos, aunque fueron las drogas las que terminaron de perderlo.
El actor que le dio vida a la ‘Señora Doubtfire’ “estaba muy enganchado [a la cocaína]”, afirma su compañero de reparto Eric Idle, quien recuerda que el cómico se convirtió en estrella de la noche a la mañana."La cocaína es la forma que tiene Dios para decirte que estás ganando mucho dinero", declaró el actor en una entrevista hace años. Este pasó de tener el dinero justo para sobrevivir a ganar 12.800 euros a la semana -de aquel momento-."Era parte del mundillo en esa época; en algunos bares hasta te pagaban 'en blanco o en verde'”, confesó.
El antes y el después
John Belushi fue el culpable y el salvador de que no ocurriera una prematura tragedia. Belushi se convirtió en el Sancho Panza de Williams en las noches de parranda -que en su día, eran la gran mayoría-. Una noche se cumplió el nunca más; Belushi murió en el hotel donde se alojaba de sobredosis. El Quijote le vio las orejas al lobo y además de ser el principal protagonista de la investigación de la muerte de su amigo debido que la noche anterior la pasaron juntos, esta fue la causa de que durante años el intérprete de Hook se mantuviera lejos de las drogas. La actriz Pam Dawber cuenta como al día siguiente del terrible altercado y después de conocerse la muerte de su amigo y compañero, le dijo a Williams: “Si eso mismo te pasa a ti, yo voy antes de que te mueras y te mato yo misma”.
El susto lo mantuvo alejado de los estupefacientes pero no de la bebida. Tras años de austeridad, el representante del reconocido actor tuvo que hacer un comunicado informando de que Williams había ingresado en una clínica de rehabilitación por recaer en el alcohol.
Las mujeres también le hicieron perder sus cabales en algún momento, tanto es así que se casó en tres ocasiones y tuvo tres hijos. Su primera exmujer, Valerie Velardi, madre de su primogénito, declara en el documental que ella era consciente de las infidelidades de su marido, pero que ella las aceptaba: “Él amaba a las mujeres, absolutamente amaba a las mujeres y yo lo entendía. Quería que tuviera lo que él deseaba, pero también quería que volviera a casa”.
El valor de una carcajada
En cambio, una de las declaraciones del documental que más huella deja viene de parte de Billy Cristal, en el que afirma que una de las adicciones más importantes del comediante era el humor. Para Williams era tan necesario hacer reír como el primer café del día: “Es algo muy poderoso para los comediantes. Esa risa, esa necesidad de hacer reír, es como una droga. “Esa aceptación del público es muy difícil de reemplazar con algo más”, concluye el también cómico.
En un mundo donde te dan la mejor mesa del restaurante y el café cuando aún está caliente, donde se premia el talento y se sube al Olimpo a los que aún son de carne y hueso, todo parece no ser suficiente. Y este documental es la prueba de ello. Una estrella que prefirió dejar de ver antes que seguir quedándose ciego con los flashes del éxito.