La Policía detuvo la noche del domingo al conocido rapero Ghostemane y a su banda por destrozar el escenario y los camerinos de la sala Barceló tras el concierto que dieron allí, según han informado fuentes de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 23 horas de ayer domingo. Los responsables de la discoteca, situada en la calle Barceló de Madrid, avisaron a los miembros de la banda que tenían que acabar ya de tocar, pero estos no estaban de acuerdo y querían continuar, arengados por el público.
Sin embargo, los responsables de la sala les cortaron el audio, encendieron las luces y los efectivos de seguridad comenzaron a desalojar el local, por lo que los miembros de la banda se enfadaron y comenzaron una disputa dialéctica, que acabó con el destrozo de algunos instrumentos y de partes del escenario, además de dañar los camerinos que tenían asignados.
Los dueños de la sala Barceló avisaron entonces a la Policía, que se personó en el lugar y arrestó por un delito de daños a la propiedad a los ocho integrantes del grupo, siete estadonidenses, a los que tomó declaración a las 4 de la madrugada.
Uno de los asistentes al concierto ha explicado a Telemadrid que a la media hora de comenzar los gerentes de la sala y los vigilantes "comenzaron a recoger la sala sin mediar palabra con los artistas". Otro ha explicado que es conocido en la actuación de Ghostmane su afición por destrozar los instrumentos durante sus actuaciones.