En el final de su vida interpretó a Olenna Tyrell, La Reina de Espinas, en Juego de Tronos. Es cierto que corría el riesgo de que el 'mainstream' la aupase a última hora después de toda una vida sobre los escenarios, allá desde los cincuenta, pero lo cierto es que su trabajo en esta producción la convirtió también en un icono para generaciones más jóvenes.