Un cuadro que se iba a subastar en Madrid por 1.500 euros podría ser un Caravaggio perdido
El lienzo estaba atribuido en el catálogo al círculo de José de Ribera. El Estado español ha bloqueado su venta para que la pieza se estudie más a fondo.
8 abril, 2021 09:54Noticias relacionadas
Un cuadro titulado La Coronación de espinas y atribuido al círculo de José de Ribera (siglo XVII) iba a ser subastado este jueves en la madrileña Casa Ansorena por un precio de salida de 1.500 euros. Sin embargo, el lienzo ha sido retirado del catálogo porque podría tratarse de un bombazo: el Ecce homo de Caravaggio realizado en torno a 1605 para el cardenal Massimo Massimi. El Estado español, según ha adelantado el periódico italiano La Reppublica, ha bloqueado la venta para que la pieza se estudie más a fondo.
El ministro de Cultura ha confirmado que la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio y la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes se reunió de urgencia este miércoles para declarar el cuadro como "inexportable". La Comunidad de Madrid también ha iniciado a instancias del Ministerio la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) del óleo. "Con esa doble garantía nos aseguramos que se quede en España y que se puedan hacer las cosas bien", ha explicado José Manuel Rodríguez-Uribes.
Esta sorprendente obra aparece en dos inventarios del siglo XVII. El primero pertenece al funcionario Juan de Lezcano y el otro es una relación de bienes del conde de Castrillo, virrey de Nápoles de la misma centuria. En el primero, se describe la pintura como "un Heccehomo de zinco palmos con marco de evano con un soldado y Pilatos que le enseña al Pueblo es original de Micael Angel Caravacho", -los personajes que aparecen coinciden con el lienzo que acaba de ver la luz-, mientras que del virrey se sabe que en su día poseyó hasta dos Caravaggios.
La noticia ha hecho que varios especialistas en el artista y en su obra hayan salido a manifestar su opinión. Uno de ellos ha sido el veterano crítico e historiador del arte italiano Vittorio Sgarbi. Él sí cree que el óleo sobre lienzo de 111 x 86 centímetros fue pintado por Caravaggio y cuyo precio podría estar "entre 100 y 150 millones de euros, si [el propietario] se lo vende a un inversor privado, o de 40 o 50 millones si se lo vende al Museo del Prado", ha manifestado al Corriere della Sera.
La atribución a Caravaggio de este cuadro no solo está sustentada en la experiencia del experto, y de otros como la profesora Maria Cristina Terzaghi. Esta profesora de Historia del Arte Moderna de la Univesidad Roma Tre, explica que "el manto púrpura con el que se viste Cristo tiene el mismo valor compositivo que el rojo de la Salomé del Prado de Madrid", y que "esta obra mantiene un vínculo profundo con las pinturas elaboradas al comienzo de la estancia napolitana".
También en la interpretación de una nota autógrafa del propio artista firmada el 25 de junio de 1605: "Yo, Michel Angelo Merisi da Caravaggio, me obligo a presentarme ante el ilustre Massimo Massimi por haber sido pagado por un cuadro de valor y grandeza como el que ya le hice de la coronación de Crixto (sic)".
No obstante, otros especialistas como Nicola Spinosa, que ha publicado numerosos estudios sobre la pintura napolitana entre los siglos XV y XIX, discute la atribución: "No es un Caravaggio. Se piensa que puede deberse a que la figura del primer plano replica el Ecce homo del Museo de Prato atribuido a Caravaggio por Mina Gregori y del que existe una copia. En mi opinión, la pintura es de un caravaggieso de alta calidad, pero no de Ribera. No se puede hablar nombres de esta importancia; si fuera de Ribera, su precio partiría de 200.000 euros, no de 1.500".
"En todo caso es un cuadro muy valioso, ojalá sea un Caravaggio”, ha señalado este jueves Rodríguez-Uribes. El Gobierno quería actuar con toda rapidez para evitar la posible salida del cuadro del país y evitar así un suceso similar a la salida de otro Caravaggio en los setenta, que fue subastado y ahora está en Cleveland (Estados Unidos).
El último lienzo atribuido a Caravaggio que salió al mercado fue el misterioso Judith y Holofernes encontrado en 2014 en una buhardilla de Toulouse, en el sur de Francia. La pintura se vendió a un coleccionista anónimo, supuestamente vinculado a un gran museo, por un precio indeterminado, que podría oscilar entre los 100 y 150 millones de euros.