Los responsables del Teatro Apolo de Barcelona han comunicado al director Ricard Reguant su "decisión irrevocable de rescindir el contrato (...) por incumplimiento esencial y muy graves de sus obligaciones". Reguant, director artístico de la obra Sherlock Holmes y el destripador, que levantó el telón de la temporada, ha sido acusado de nepotismo.
La empresa Ethika Global Real Estate S.L., que explota el teatro, considera que Reguant "ha realizado de manera muy deficiente sus tareas, con bajo rendimiento y resultados de taquilla y crítica claramente negativos, muy por debajo de lo esperado". El propio director había reconocido en septiembre que la temporada había sido "nefasta" para el Teatro Apolo, con un déficit de casi un millón de euros.
La empresa gestora también ha decidido cesar a Reguant como gestor del teatro "incluyendo sus responsabilidades, la programación de espectáculos, dirección y producción de obras propias; y, en general, la gestión de dicho activo cultural". Según se asegura en el comunicado, el Teatro Apolo "continuará normalmente con su actividad" y en las próximas semanas se anunciará "en quién recae la responsabilidad de gestionar y programarlo".
Sin embargo, según informa la Agencia Catalana de Noticias, la obra Sherlock Holmes y el destripador ha quedado cancelada después de que algunos de los 11 actores del reparto no quisieran subir al escenario en la función de este miércoles tras el despido del director artístico.
Fuentes de la dirección del teatro han señalado que Reguant contrataba “de manera sistemática” a autores, actores, letristas y músicos de su familia. El teatro iniciará un proceso judicial para exigir a Reguant 500.000 euros por los “prejuicios causados”.