El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, sigue empecinado en que España debe pedir perdón a México por los agravios de la época de la conquista, registrados hace cinco siglos. El mandatario difundió este domingo un nuevo y polémico mensaje a través de un vídeo en redes sociales que grabó desde las alturas de un hotel en el Malecón del Puerto de Veracruz, ciudad que este lunes celebrará los 500 años de historia.
"Este es el debate, cómo conmemorar la conquista, la invasión o verlo como el encuentro de dos mundos es un asunto pendiente", dijo López Obrador. "En el caso de los veracruzanos ya lo resolvieron, con música, alegría y cultura, pero todos les debemos una explicación a los pueblos originarios porque hubo abusos y a nadie se le niega el perdón". AMLO sigue, de esta forma, prolongando una polémica que los historiadores han tachado de "anacrónica" y que está amparada en el "presentismo".
Paradójicamente, México celebra este lunes 500 años de historia de Veracruz, una ciudad fundada por el poliédrico conquistador español Hernán Cortés el 22 de abril de 1519. Este domingo, en el malecón de la localidad del golfo de México, se presentó el proyecto de mural que retratará el encuentro entre los conquistadores españoles y los pueblos originarios en las costas veracruzanas, mientras que este lunes se presentará el libro Veracruz, una puerta de cinco siglos. Y en esos actos conmemorativos se ha dejado ver el propio López Obrador... pero para seguir defendiendo sus postulados.
El conquistador extremeño fundó la Villa Rica de la Vera Cruz, actual Veracruz, en las costas donde desembarcó junto a su tropa para emprender el proceso de conquista, que culminó con la caída de Tenochtitlan, actual Ciudad de México, el 13 de agosto de 1521. Veracruz, considerada la primera ciudad erigida por europeos en toda América continental, ha sido reconocida por el Gobierno mexicano como "cuatro veces heroica" por haber resistido a cuatro intervenciones extranjeras a lo largo de su historia.
Este domingo, además, se han conmemorado los 105 años de la ocupación estadounidense de Veracruz en 1914 para evitar la llegada a la ciudad de un gran cargamento de armas del gobierno del presidente golpista Venustiano Carranza (1913-1914). Previamente, la ciudad había sido considerada heroica tras los bombardeos sufridos por parte de las fuerzas españolas al finalizar la guerra por la independencia de México (1810-1821).
También por haber resistido a los bombardeos de la Armada francesa el 21 de noviembre de 1838 y los bombardeos durante la guerra entre México y Estados Unidos (1846-1848).
Punto de encuentro entre dos mundos
La Fundación 500 Años de la Vera Cruz, que aglutina a 257 miembros entre escritores, historiadores, escultores, pintores, educadores, fotógrafos, expertos gastronómicos y músicos, es la encargada de la organización de los actos conmemorativos de estos cinco siglos de historia.
Esta organización civil, que lleva trabajando en los festejos desde 2015, considera la fundación de Veracruz como "el nacimiento de una cultura producto del encuentro de dos mundos", según relata su página oficial. Conferencias, bailes, conciertos, obras de teatro, óperas y festivales gastronómicos son algunas de las actividades que esta asociación organiza desde este mes de abril hasta el próximo diciembre para recordar la fundación de la ciudad.
El presidente de la fundación, Jaime Baca Olamendi, dijo recientemente en una entrevista con Efe que, más allá de las polémicas, las relaciones entre Veracruz y España son excelentes por la gran cantidad de veracruzanos con raíces españolas.
"Veracruz se funda en un lugar donde no existía un asentamiento de los pueblos originarios, donde no había un asentamiento previo. Entonces se empieza a crear una comunidad multicultural, de muchas nacionalidades, no solo de los pueblos originarios, sino de las europeas", explicó.
Un perdón rechazado
Las nuevas proclamas de López Obrador vienen a prolongar la polémica que inició el 1 de marzo cuando envió una carta al rey Felipe VI de España y al papa Francisco en la que exigía disculpas por los agravios cometidos por los españoles y la Iglesia católica contra los pueblos indígenas.
En aquella ocasión, también mediante un vídeo, el político izquierdista explicó los motivos de la carta, aseveró que la conquista "se hizo con la espada y la cruz" y recriminó que hubo "matanzas", "imposiciones" y "se construyeron iglesias encima de los templos" prehispánicos.
"Es tiempo ya de decir que vamos a reconciliarnos, pero primero pidamos perdón", dijo el mandatario mexicano y apuntó que él también se disculpará en nombre del Estado mexicano por "la represión a los pueblos originarios" que hubo tras la independencia del país.
Como respuesta, el Gobierno español aseguró que Felipe VI no se disculpará y lamentó que se hiciera público el contenido de la carta, el cual las autoridades españolas rechazaron "con toda firmeza".