La autoridad arqueológica israelí ha anunciado el descubrimiento de los restos de una iglesia de 1.300 años de antigüedad cerca del Monte Tabor, el bíblico Monte de la Transfiguración, donde según la tradición cristiana Jesús empezó a brillar con rayos de luz y habló con los profetas Moisés y Elías.
Cerca del lugar se levanta hoy el pueblo de Kfar Kama, donde se ha descubierto la iglesia durante una excavación arqueológica previa a la construcción de un parque infantil municipal. Según explicó la arqueóloga Nurit Feig, de la Autoridad de Antigüedades de Israel (AAI) y directora de la excavación, el edificio tiene unos 430 metros cuadrados y cuenta con un gran patio y un vestíbulo.
A diferencia de otras construcciones de éste tipo, esta iglesia contaba con tres ábsides en lugar de uno. Otros de sus elementos destacables son sus mosaicos, un pequeño relicario de piedra para preservar objetos sagradas y una colorida decoración, que incorpora formas geométricas y patrones florales azules, negros y rojos.
Según un comunicado difundido hoy por la AAI, se descubrieron también una serie de habitaciones adyacentes a la iglesia, que se seguirán excavando y que podrían ser restos de un monasterio.
Este descubrimiento enfatiza la importancia de la aldea cristiana establecida en el período bizantino cerca del Monte Tabor, donde según la tradición cristiana Jesús se transfiguró.
"Y como ocho días después de estas palabras, Jesús tomó consigo a Pedro, a Juan y a Jacobo y subió al monte a orar. Y entre tanto que oraba, la apariencia de su rostro se puso brillante, y su vestido blanco y resplandeciente. Y he aquí dos varones que hablaban con él, los cuales eran Moisés y Elías, quienes aparecieron rodeados de gloria", recoge el Evangelio según San Lucas.