El deshielo registrado en el paso de Lendbreen, en el interior de Noruega, ha arrojado a la luz una ruta comercial que estuvo en funcionamiento entre los años 3000 y 1500. Los arqueólogos han logrado rescatar numerosos artefactos vikingos como guantes de punto, zapatos de cuero, antiguos trineos, un cuchillo con mango de madera, una rueca y un batidor de madera, un bastón con una inscripción rúnica y hasta raquetas para la nieve adaptadas a los caballos.