Un equipo de arqueólogos ha encontrado en China los restos de un antiguo muro y un foso de hace alrededor de 5.200 años. Los expertos llevaban desde agosto del año pasado excavando la zona en busca de yacimientos y estructuras del pasado.
Tras una primera examinación de los hallazgos, creen que los restos pertenecen a varias fases culturales de la historia china, que oscilan entre los 3.900 y 5.200 años de antigüedad.
En el enclave, conocido como Fenghuangzui, localizado en la ciudad de Xiangyang -cerca de Wuhan- se encuentra una ciudad neolítica en un área que mide aproximadamente 140.000 metros cuadrados. Los arqueólogos, en aras de concretar su campo de estudio, comenzaron en agosto de 2020 a indagar en un espacio de algo más de 450 metros cuadrados, con la suerte de hallar estos restos arqueológicos en buen estado.
"El descubrimiento nos dio una idea básica sobre el surgimiento y la desaparición de la ciudad antigua", ha comentado Shan Siwei, uno de los principales arqueólogos del equipo de excavación, a medios chinos.
Además del tramo de muralla de 1.500 metros de longitud y el foso, también han emergido en la zona algunas casas, fosas, acequias para conducir el agua, tumbas, féretros y arcillas.
"Según el estilo de construcción y los elementos desenterrados, creemos que el sitio solía ser un centro regional en el pasado y también debió cumplir importantes funciones militares", agregó Shan.