La pensadora e investigadora británica Karen Armstrong ha sido merecedora del Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2017 por tratarse de "una de las mayores autoridades" en el conocimiento del judaísmo, el cristianismo y el islam, y por "la profundidad de sus análisis históricos".
El acta del jurado, que ha sido leído en Oviedo por su presidente, el exrector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) Rafael Puyol, también destaca de Armstrong "su inmensa labor bibliográfica e investigadora, así como su compromiso activo con la difusión de un mensaje ético de compasión, paz y solidaridad".
Además, ha valorado que la pensadora participe activamente en diversas instituciones internacionales encargadas de propiciar el diálogo cívico religioso.
Al otorgar este premio, el jurado quiere destacar "la relevancia del estudio de las religiones para comprender la sociedad y el mundo contemporáneos".
Armstrong (1944), quien ingresó en un convento católico en 1962 pero siete años más tarde decidió abandonar la vida religiosa para licenciarse en Literatura Contemporánea, ha recibido, entre otras distinciones, el Premio TED (EEUU, 2008), el Building Bridges de la Asociación de Científicos Sociales Musulmanes (Reino Unido, 2004) y el The Freedom of Worship de la Fundación Roosevelt y el Instituto Roosevelt (EEUU, 2008).
Este es el quinto de los ocho premios convocados por la Fundación Princesa de Asturias que se ha fallado en su XXXVII edición, después de concederse el de las Artes al artista sudafricano William Kentridge; el de Comunicación y Humanidades, al grupo de músicos y humoristas argentinos Les Luthiers; el de Cooperación Internacional, a la Hispanic Society of America; y el de Deportes, a selección masculina de rugby de Nueva Zelanda.