Alfred Nobel legó en su testamento la voluntad de crear una ceremonia que premiase lo mejor del ingenio humano, como una forma de devolver a la sociedad lo que su invento —la nitroglicerina— le había quitado. La primera entrega se produjo en 1901, seis años después de la muerte del químico, con las cinco categorías de Ciencia, Medicina, Paz, Economía y Literatura ya presentes. Nobel escribió en su testamento que el galardón dedicado a este último se concediese "a quien hubiera producido en el campo de la literatura la obra más destacada, en la dirección ideal".
En su edición de 2021, la pandemia ha provocado cambios en la ceremonia, que se cancela este año por las restricciones en vuelos internacionales. Con motivo de la incertidumbre que todavía rodea a este tipo de actos, la Academia ha optado también por el envío de diplomas y medallas a los hogares de los galardonados. A la medalla con la efigie del sueco se le añade además una dote de diez millones de coronas suecas, el equivalente a casi un millón de euros. Un galardón que es administrado por la Fundación Nobel, sin decisión sobre los premiados, un trabajo que recae sobre la Academia de Estocolmo.
A pesar de los cambios vividos en las dos últimas entregas, los Nobel siguen generando una gran expectación en todo el mundo. A escasos días de conocerse el fallo del jurado comienzan las especulaciones en las casas de apuestas por saber quién será el ganador del Nobel de Literatura. Estos son algunos de los favoritos, con nombres ya habituales y algunas sorpresas que el 'efecto Dylan' podría dejar este año.
Los cinco favoritos
El japonés Haruki Murakami ha sido el eterno favorito de esta última década. El autor de Kafka en la orilla o Tokio Blues, es uno de los autores más influyentes de los últimos tiempos. Este otoño regresa con una nueva novela, Primero de singular. No sería la primera vez que un autor nipón gana el premio de la Academia Sueca. En 1968, Yasunari Kawabata se convirtió en el primer autor japonés en ser galardonado con el Nobel, y el segundo asiático tras el indio Rabindranath Tagore.
Haruki Murakami en una entrega de premios en Berlín en 2014.
Ngũgĩ wa Thiong'o también lleva años apareciendo en las quinielas. Nacido en Kenia y encarcelado a finales de la década de los 70 por escribir una obra de teatro en su lengua materna: el gikuyo. Sus ensayos y novelas dan buena cuenta del pensamiento poscolonial en África, intentando recuperar el peso de una identidad perdida y ninguneada por las potencias europeas. Novelas como Un grano de trigo o ensayos como Desconolonizar la mente figuran entre sus obras más destacadas.
La poeta canadiense Anne Carson ya recibió el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2020, este año resuena como una de las favoritas para el Nobel de Literatura. Considerada por la crítica literaria anglosajona como la poeta viva más importante de la actualidad. Sus trabajos de traducción e interpretación de obras clásicas le han brindado un estatus que al que solo le faltaría este premio como broche final. Autobiografía de rojo retoma esta inspiración para contar en una novela en verso uno de los episodios de la vida de Heracles, un trabajo por el que obtuvo un enorme éxito de crítica y público, en 2013 publicó su segunda parte, Red Doc.
Annie Ernaux ha dedicado su carrera literaria a lo autobiográfico, narrando con un lenguaje simple y sin artificios distintos episodios de su vida y la de su familia. La primera entrega de esta serie llegó con Una Mujer, recogiendo la historia de su propia madre para continuar con sus recuerdos de adolescencia en Normandía o el devenir de su matrimonio en obras posteriores. Aunque Ernaux no ha sido ampliamente traducida en nuestro país, ha recibido la admiración de autores franceses por su soberbio uso de la primera persona literaria de la mano de Virginie Despentes o Emmanuel Carrère.
La escritura Annie Ernaux en el Festival de la Literatura de Roma.
Lyudmila Ulitskaya sufrió en sus propias carnes los estragos de la Segunda Guerra Mundial. Nacida al sur de los Urales, la escritora rusa se posiciona como una de las figuras más prominentes de la literatura contemporánea de su país. Licenciada en bioquímica, el reconocimiento internacional le llegó con la adaptación de dos de sus guiones cinematográficos: Hermanas Liberty y Una mujer para todos. Sus obras literarias han sido traducidas a más de treinta idiomas, entre las más notables están Mentiras de mujeres y Sóniechka.
Los otros favoritos
Otro de los nombres que figura en la mayoría de listas es el de Margaret Atwood. La autora de El cuento de la criada es una de las escritoras vivas de habla inglesa más reconocidas del mundo. En los últimos las adaptaciones de sus libros han cosechado un gran éxito que podría decantar la balanza a su favor. El siempre misterioso Thomas Pynchon también se postula entre los favoritos a pesar de su condición de "autor maldito" y el velo de secretismo que rodea cualquier aspecto relacionado con su vida personal. Después de cinco décadas como autor de referencia en Norteamérica —dejando novelas como El arco iris de gravedad o La subasta del lote 49— no se conserva ninguna foto suya, creando una leyenda a su alrededor que incluye el envío de dobles a entregas de premios y falsos entrevistados.
La autora de la saga Harry Potter, J K Rowling, también podría llevarse un Nobel que serviría como broche a una carrera literaria monolítica, acercando a la lectura a toda una generación de niños. Don De Lillo también resuena como uno de los posibles. El gran retratista de los Estados Unidos del siglo XX es autor de libros que marcaron un antecedente en las letras anglosajonas con Ruido de fondo o Submundo.
El siempre polémico Michel Houellebecq también figura entre las listas de posibles, un premio que sería el decimoquinto para un autor francés en la historia del galardón. Se repiten un año más los nombres de la italiana Elena Ferrante, la antiguana Jamaica Kincaid o el rumano Mircea Cartarescu.
¿Algún español?
El español es el cuarto idioma más reconocido por la Academia después del inglés, el francés y el alemán. Sin embargo, son solo once los galardones que han ido a parar a autores de habla hispana, seis de ellos de España, dos de Chile y el resto de Guatemala, México y Perú. El último en conseguirlo fue Mario Vargas Llosa en 2010. Jorge Luis Borges, eterno favorito, ironizó con un premio que jamás se le llegó a conceder en esa "antigua tradición escandinava: me nominan para el premio y se lo dan a otro".
Camilo José Cela sujetando el Nobel en 1989.
José Echegaray, Jacinto Benavente, Juan Ramón Jiménez, Vicente Aleixandre y Camilo José Cela son los escritores españoles que se han alzado con el premio de la Academia de Estocolmo. Una distinción que desde 1989 no va a parar a un autor español. Este año Javier Marías se sitúa entre los favoritos de nuevo, intentando romper con la maldición. El autor de Corazón tan blanco o Los enamoramientos podría hacerse con el galardón por una trayectoria plagada de éxitos de público y crítica.
Un Nobel punk
El 'efecto Dylan' ha sido innegable en las quinielas literarias desde el año 2016. No sorprenden nombres como los de la cantautora canadiense Joni Mitchell o la madrina del punk Patti Smith. Esta última fue la encargada de poner una nota musical durante la ceremonia de entrega al músico norteamericano, interpretando A hard rain's gonna fall.
Mientras que Mitchel es una de las figuras más prominentes de la canción de autor de las décadas de 1960 y 1970, con canciones cargadas de lirismo que ayudaron en el acercamiento de la literatura a la música popular; Patti Smith representó la rama más poética del movimiento punk surgido en 1977 en las inmediaciones del CBGB neoyorquino. Esta última es además autora de varias novelas de éxito, con Éramos unos niños consiguió el National Book Award del año 2010.
Patti Smith durante la ceremonia del Nobel en 2016.