Leonard Cohen murió dormido, en su casa de Los Ángeles, después de una caída en medio de la noche. El cantante y compositor falleció el 7 de noviembre a la edad de 82 años. Su muerte fue confirmada unos días más tarde mediante un anuncio en su página de Facebook oficial. La nota no detallaba en qué circunstancias se había ido.
Ayer miércoles, Robert Kory, su mánager, explicó que su muerte fue inesperada. "Murió mientras dormía, a medianoche", sostuvo. "La muerte fue repentina, inesperada y tranquila". Según el comunicado, a Cohen le sobreviven sus hijos, Adán y Lorca, y sus tres nietos, Casio, Viva y Lyon. A principios de esta semana, Adam Cohen dijo que el funeral de su padre había tenido lugar en su ciudad natal de Montreal. "Mi hermana y yo acabamos de enterrar a mi padre en Montreal. Con algunos amigos de toda la vida y nuestra única familia inmediata, él descendió a la tierra en una caja de pino sin adornos, al lado de su padre y de su madre. Exactamente como él había pedido".
Se prevee que Los Ángeles acogerá un monumento en su honor. Cohen había sacado en octubre su decimocuarto álbum, You want it darker, y, en una entrevista en ese mismo mes, aseguró que estaba "dispuesto a morir". Le dijo a la revista New Yorker: "Estoy listo para ello. Espero que no sea demasiado incómodo. Eso es bastante para mí".