2017 ha sido el año del feminismo. Por las manifestaciones multitudinarias contra La Manada, por la rebelión contra los actos culturales financiados con dinero público en los que no hay representación femenina, por la sucesión de denuncias contra Harvey Weinstein y sus acólitos. Por lo que simboliza el productor -la violencia y el abuso machista, el poder y la cultura del silencio- y porque el icono de la impunidad se está derrumbando.
Ese cambio en la mirada, esa suerte de justicia feminista la ha canjeado la banda de rock TENLo en su canción Kill All The Things, donde Harvey Weinstein, ese hombre marginado ya por la industria, vuelve a escena un ratito, haciendo gala de sus ademanes pretenciosos y de su vieja chulería. Aunque no es exactamente él mismo, sino su doble ficticio, el actor Dustin Diamond -Screech en la mítica serie Salvados por la campana-.
La presentación del vídeo ya avisa: “Cuentos de sexo y castigo”. La actriz protagonista es Kelly Cunningham e interpreta a una monja dispuesta a hacer sangrienta justicia. Los chicos de la banda, Joey Zak y Tome LaBrosse, hacen del botones y del barman. La historia arranca cuando Weinstein baja de su coche mirando alrededor con gesto desafiante: camisa levemente desabrochada, colgante de oro, barba cana y mirada de ser el rey del mambo. Mientras, la mujer, en una habitación, se maquilla, ingiere pastillas y un poco de vino. Está preparándose para lo que está a punto de ocurrir. Lleva el rosario enganchado a los dedos de una mano y no lo suelta en ningún momento.
Tmz.com asegura que el vídeo fue grabado en Milwaukee este verano, incluso antes de que surgiesen las numerosas acusaciones contra el magnate de Hollywood por abuso y acoso sexual
Weinstein acude al baño y se droga. Consume cocaína y se limpia la nariz. Va a la barra y pide chupitos. Saluda a todos como el gran sheriff, apuntando al aire con pistolitas invisibles. Ella lo saca del lugar, le abraza y lo conduce a la habitación de hotel. Lo empuja a la cama y cierra la puerta: se arrodilla, pero es ante dios. Cuando se sube a horcajadas encima de él y parece que van a tener sexo, lo apuñala. La sangre le salpica en la cara. Aquí la imagen rompedora y poética: la muerte social de un abusador y violador.
Tmz.com asegura que el vídeo fue grabado en Milwaukee este verano, incluso antes de que surgiesen las numerosas acusaciones contra el magnate de Hollywood por abuso y acoso sexual. El parecido entre ellos, por cierto, es asombroso: el actor y el productor comparten la forma de la nariz, la mandíbula ancha y la barba grisácea de tres días.