Personas vestidas con chalecos amarillos de organización del Primavera Sound han repartido hoy caretas con la cara del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, al cierre del festival, durante la actuación de DJ Coco. Las caretas han sido distribuidas a partir de las 4:30 horas cuando aparecieron cajas llenas con ellas, que no se sabe quién ordenó sacar, pero que pronto quedaron repartidas entre las miles de personas que echaban el resto en el último concierto de esta edición del multitudinario festival barcelonés.
A partir de ahí, el Fórum se llenó de imágenes curiosas: personas bailando con las caretas puestas, otras que las llevaban en la mano cual pulsera e incluso otras que colocaban la cara del expresidente como objeto decorativo en barras y mobiliario. Parte de quienes recibieron las caretas eran extranjeros que habían viajado expresamente a Barcelona para acudir al Primavera Sound y cogieron las caretas con extrañeza, ya que no reconocían la cara que había en ella, aunque se la colgaron igualmente.
No es la primera vez que el Primavera se manifiesta políticamente. En septiembre del año pasado, el Festival manifestó su indignación tras los registros que efectuó la Guardia Civil en varios edificios de la Generalitat -en los que se detuvieron al menos a 14 altos cargos-. Aseguraron que ni "pueden ni quieren quedarse callados ante los acontecimientos que han tenido lugar en los últimos días en Catalunya", y, apuntan, "especialmente hoy en Barcelona, la ciudad que acoge el festival": "Queremos manifestar públicamente nuestro apoyo a todas las instituciones, entidades y personas que durante estas últimas horas están sufriendo esta agresión a sus derechos civiles más fundamentales".