Entre Abraham Mateo y Juan Magán no suman para igualar el número de suscriptores en Youtube que tienen Adexe & Nau: casi nueve millones. Los temas de los dos primeros artistas suenan cada día en todas las discotecas españolas, en las radios musicales. Las canciones del dúo de hermanos canarios, por el contrario, dominan en colegios e institutos, arrasan en las redes sociales, territorio de la generación Z. Son el fenómeno musical del momento entre los más jóvenes, el reguetón adolescente y rebelde, pegadizo, bailable, que quiere competir con el de los mayores. Incluso tienen una forma de nombrar a sus fans: naudexers.
Con apenas 16 y 13 años, Nauzet y Adexe Gutiérrez Hernández, tinerfeños, han de gestionar un reconocimiento y una sobreexposición nada habituales para su edad. Son las estrellas musicales de su generación, y ellos lo llevan con una naturalidad pasmosa, con la diversión y el disfrute por leitmotiv. No hay límites, no hay barreras, no hay miedos, solo ganas de soñar y de llegar "hasta el infinito y más allá". Eso es lo que dicen en conversación telefónica con EL ESPAÑOL a media tarde de un día lectivo, justo después de salir de la escuela. ¿Pero quiénes son Adexe & Nau?
"Dos chicos muy divertidos, muy amenos, que hacemos música para divertir a la gente", responde Adexe, el pequeño, y le cede el testigo a su hermano: "Si alguien quiere escuchar algo diferente, nuevos sonidos, nuevas letras, ritmos urbanos mezclados con otros estilos, lo va a encontrar con nosotros". Dicen haber creado un género propio, combinando la vertiente más latina de Adexe con las rimas de hip-hop de Nau. Pero sus temas no hay que encasillarlos exclusivamente en las listas de reguetón, sino que buscan "música para toda la familia", repiten ambos a la vez, como un grito de guerra.
Al universo profesional de la música primero se lanzó Adexe. En una fiesta, con 7 años, agarró el micrófono y puso a bailar a todos los presentes. El productor Iván Troyano, sorprendido ante el desparpajo y talento de ese niño, le animó a grabar un tema, Soy el único, con otro rapero canario, que confirmó sus presagios: Adexe podía convertirse en un fenómeno.
Luego llegó Nau, y ambos hermanos consolidaron un dúo que se dedicaba a versionar canciones de otros artistas de talla internacional, como Nicky Jam, Cali y El Dandee o Wisin, al que añadían un videoclip guasón, divertido, que tenía a dos niños con pintas de gamberrillos de protagonistas. La receta se reveló en un éxito total y sus vídeos se hicieron virales hasta pegar el gran pelotazo con el cover de Andas en mi cabeza (Chino & Nacho), que hoy supera los 635 millones de reproducciones en Youtube.
El mensaje de sus canciones
Adexe & Nau cuentan que comenzaron grabando estas versiones con el único objetivo de "dejar un recuerdo a la familia y a los amigos", pero se viralizaron tanto que ni ellos mismos son capaces de ofrecer una explicación verosímil. Engancharon con todo el abanico de su generación, no solo en España, sino también en EEUU y Latinoamérica, de donde procede gran parte de sus seguidores. "Es muy emocionante, estamos viviendo un sueño que no somos capaces de asimilar", relata el hermano mayor.
Hablan orgullosos de sus dos discos ya publicados —el último, Binomio perfecto, ha vendido más de 5.000 discos en un mes—, de los conciertos multitudinarios en España, México, Uruguay o Argentina, de su reciente single con Abraham Mateo o del último EP con el joven cantante Izan Llunas. "El impacto que ha tenido su música en Youtube es el más grande que ha conseguido un artista español en la historia", se lee en su pequeña biografía en la página de Sony Music.
Y ahora ya crean sus propios temas, sus letras. ¿Qué mensaje quieren transmitir? "Lo que escribimos es lo que pasa por la cabeza de los adolescentes: amor, desamor, fiesta, locura...", cuenta Nau. No se entendería su fenómeno sin las redes sociales, donde muestran un perfil muy youtuber; ni tampoco cómo sus canciones llegan a niños de seis años que cantan en su casa el estribillo de Solo amigos, uno de sus hits más conocidos: "Ella no comprende que yo solamente quiere ser su amigo y luego se enfada conmigo / Ella me pide algo más, pero yo no se lo puedo dar / Yo no me hago de rogar, solo puedo darle mi amistad".
El reguetón siempre está perseguido por por ese componente machista, por unas letras degradantes hacia las mujeres, ¿y cómo gestiona ellos esto? "Nuestras canciones transmiten valores para la gente joven y siempre hay que mostrar respeto hacia la mujer", explica Nau. Adexe, más directo, añade que ellos pertenecen a "una nueva generación" mucho más compresiva. Es la del reguetón para toda la familia, sin machismo ni sexo. Ya no tienen los niños y niñas por qué escuchar a Maluma cantar "siempre me dan lo que quiero / chingan cuando yo les digo" o a Becky G y Natti Natasha decir "siempre he sido una dama / pero soy una perra en la cama".
Los hermanos —dicen que eso les ayuda a compenetrarse más, porque en todo momento saben lo que piensa el otro y comparten gustos— han mamado música desde que eran bien pequeños, lo que explica su pasión. "Seguimos siendo iguales", añaden, conscientes de que su éxito puede ser pasajero, volátil. Por si acaso, ellos no descuidan lo estudios; y tienen bastante claro el mundo en el que querrían sumergirse si sus canciones dejan de enganchar: Adexe en el del periodismo deportivo y Nauzet en el de la criminalística.