Andrés Calamaro no va a votar a Vox por mucho que prefiera "el vértigo de los patriotas y reaccionarios" a las políticas que abanderan los "moderados" Sánchez, Rivera, Casado e Iglesias. El músico ha confirmado con una publicación en su perfil de Facebook que es residente en Argentina y que, por lo tanto, no tiene derecho a acudir a las urnas este domingo. Sin embargo, sí que se ha mostrado mucho más equidistante con su apoyo a la formación de Santiago Abascal con unos versos y otros comentarios también lanzados a la red.
"Es el debate virtual / El mas áspero de todos / No respeta buenos modos / Ni el respeto general. / La regla es universal / A nadie escapa el echo / Que opina hasta el berberecho / Y los unicelulares. / Son tendencias populares / Escribirlo con despecho", se arranca Calamaro en el poema, que sigue: "En este mondo lirondo / Donde manda el aparato / No hay suficiente arrebato / Ni circulo tan redondo / Discretamente me opongo / Perdóname si me afano / Y pido como un hermano / Por virtud los los instantes / Hay cosas mas importantes / Que el teléfono en la mano".
Es una clara crítica a la jungla de opiniones y debates guerrilleros que se producen cada instante en las redes sociales; y el artista lo ha podido comprobar en sus carnes este jueves. "Hostias! Soy TT [trending topic] por primera vez en la vida y por cuestiones de cultura política transversal", ha señalado. Además, ha entrado al trapo de muchos seguidores que le han reprochado su apoyo a una formación de extrema derecha como Vox. "No soy fascista, soy popular. Estoy en Argentina en el diálogo y el pensamiento", ha explicado.
Únicamente ha mencionado a Abascal y los suyos directamente en un comentario, que dice lo siguiente: "No defiendo a Vox ... Son partidos políticos en las elecciones, no necesitan de mi defensa. No pido nada, nadie me pide nada, no tengo patrón. Defiendo la tauromaquia y mis libertades propias. Y mas cosas". Calamaro se ha mostrado en contra de "un mundo globalista que defiende las tradiciones mientras las suprime igualando lo distinto".
En otras interacciones con sus seguidores, ha aprovechado para lanzar más versos comedidos en lo que a partidismo ideológico se refiere: "Para los reaccionarios / Soy un loco peligroso / Porque me banco el acoso / Controles no necesarios / Peligro en los calendarios / Me dan con lo que no tienen / Palabras que no convienen / Salen solas de mi boca / Con alegría carioca / Aunque algunas te envenenen".
Calamaro ha justificado sus palabras iniciales asegurando que son cuestiones "transversales a las alas izquierda y derecha de la política", como la tauromaquia, los derechos de las mujeres, la despenalización de la marihuana, el aborto o los impuestos, y no "ideológicas". "Puedo ser aficionado a los toros, republicano y comunista. Y lo soy... Pero respeto las instituciones en España. España es un proyecto plural", ha señalado, antes de despedirse diciendo que, para él, "la política es una cuestión cultural, nunca un motivo de rencillas personales ni furia".