Con su eterno aspecto de chico corriente, Ed Sheeran ha enamorado este viernes a los 55.000 espectadores que han llenado el Estadio Olímpico Lluis Companys de Barcelona y se han dejado las gargantas, y alguna lágrima, durante su esperada actuación, dos años después de su último paso por la ciudad.
El concierto se enmarca en la gira "÷ Tour", que arrancó a principios de 2017 como presentación de su tercer álbum de estudio y que se ha alargado más de dos años acumulando éxitos y rompiendo récords. Con "Divide" y el single "Shape of you", el británico logró en 2017 la "triple corona" de Spotify: el artista, el álbum y la canción más escuchados del año fueron suyos.
Al contrario de lo que su nombre indica, el "÷ Tour" ha "multiplicado" los registros de asistencia y se ha situado ya como la segunda gira con mayor recaudación de la historia, justo por detrás de la "360º Tour" de U2, y si sigue su curso podría incluso destronar a los irlandeses.
Unos beneficios que Sheeran no tiene que dividir con nadie, dado que en sus espectáculos el británico actúa solo con su guitarra y el "looper", unos pedales con los que hace el resto de efectos y sonidos.
En medio de una enorme expectación entre sus fans, el concierto ha empezado con "Castle on the hill" y un "Bona nit Barcelona" que ha enloquecido por primera vez a los espectadores.
El pelirrojo ha demostrado su cercanía y modestia en sus interpelaciones al público entre canción y canción, en las que ha explicado recuerdos de su primera actuación en Barcelona, las historias detrás de algunas canciones o cómo organiza las coreográficas.
Canciones icónicas
Justamente en "The A team", una de sus canciones icónicas, Sheeran ha contado que se trata de un tema que le acompaña desde sus inicios, dado que lo ha tocado en todos sus conciertos desde que empezara hace diez años y actuaba en pubs para cinco personas.
En sus interpelaciones al público, Sheeran ha puesto a prueba las gargantas de los espectadores al pedirles que mostraran su energía y gritaran lo más fuerte posible.
Si en determinados momentos ha solicitado al público que 'enloqueciera', en "Tenerife sea" le ha retado a comprobar "como de silencioso" podía ser, creando así un ambiente íntimo que, si no fuera por las miles de lucecitas surgidas de los móviles, parecería que Sheeran volvía a estar en ese pub de hace 10 años ante cinco personas.
Una de las novedades respecto a su concierto en el Palau Sant Jordi de 2017 ha sido el tema "I don't care", el primer 'single' del nuevo disco que saldrá el próximo 12 de julio y en cuya canción colabora Justin Bieber.
"Si no os sabéis esta, estáis en el show equivocado", ha ironizado Sheeran justo antes del romántico éxito "Thinking out loud", una de las canciones más aclamadas por el público, que ha inaugurado el tramo baladas de amor, que ha continuado con "Photograph" y "Perfect".
Sheeran también ha demostrado su amor por la ciudad recuperando el tema "Barcelona", una canción que no acostumbra a tocar en sus conciertos y que, como su nombre indica, es un homenaje a la capital catalana lleno de tópicos como la sangría y las Ramblas.
"Sing" ha vuelto a hacer que el público cantara a pulmón, saltara y aplaudiera sin parar para encarar con energía los dos bises: "Shape of you", el éxito por antonomasia que ha levantado pasiones y móviles para disfrutar y grabar para la posteridad una canción que sin duda es histórica.
Finalmente, para cerrar el concierto, que ha durado casi 2 horas, "You need me, I don't need you" ha culminado la noche con una demostración de fuerza en un tema más cercano al rap, donde Sheeran se ha desahogado del todo rasgando las cuerdas de la guitarra a toda velocidad, saltando, bailando y subiéndose a los altavoces.
Cuando vino a Barcelona en 2017, solo hacía una semana que el disco había salido y ya abarrotó el Palau Sant Jordi. Dos años después, consagrado en la cima de la industria musical, Sheeran ha llenado todo un estadio olímpico, hazaña al alcance de muy pocos.
Ahora, el cantante británico tendrá tres días para recuperar la voz y descansar para afrontar el concierto que dará en Madrid el próximo 11 de junio en el Wanda Metropolitano.