Escribía Sartre en La náusea que nada ha cambiado y, sin embargo, todo existe de otra manera. Han pasado más de 40 años y pese a los nuevos tiempos musicales, culturales y tecnológicos, Los Secretos continuan haciendo lo que siempre les ha llenado. Nunca se han obsesionado por el dinero ni por las modas. Ellos están por la música; por su música. "Estamos en buena forma anímicamente aunque físicamente ya no tanto", comenta entre risas Álvaro Urquijo en la entrevista concedida a EL ESPAÑOL.
Y es que el mítico grupo madrileño vuelve con un nuevo álbum a la venta desde el 20 de septiembre: Mi paraíso. El disco, que lo conforman un total de 12 canciones, sigue la línea que lleva trazando la banda desde sus inicios. El amor sigue siendo uno de los pilares fundamentales del mensaje que proyectan.
La más que conocida frase de "adaptarse o morir" es algo que no les perturba. "Nos hemos buscado nuestra parcela luchando contra las modas", explican. Recuerdan, de hecho, cómo las discográficas les dejaron de lado décadas atrás por no evolucionar hacia una música más comercial. De todos modos, recalcan que mantenerse fieles a ese estilo que tanto les caracteriza es una decisión propia y aplauden los nuevos géneros emergentes.
"Admiro muchísimo a Rosalía"
"A mi hija siempre le he puesto música de todo tipo", comparte Jesús Redondo a este periódico. Ahora, apuntan, el reguetón y el trap acaparan los gustos de los más jóvenes, hecho que respetan e incluso apoyan. "Tienen que estar ahí". Asimismo, se mojan sobre el fenómeno del momento. "Admiro muchísimo la capacidad de trabajo de Rosalía", confiesa Urquijo, quien conoce personalmente a un compañero que trabaja directamente con ella y destaca la agenda que tienen preparada de aquí a tres años.
“Cuando algo se estandariza demasiado viene algo que lo rompe”, comenta Ramón Arroyo sobre la música urbana que comenzó a surgir en España a partir de la crisis económica de hace ya una década. No obstante, consideran que hay un movimiento paralelo que vuelve a poner la mirada en el pasado gracias a estrenos de Yesterday, Rocketman o Bohemian Rhapsody.
Censura actual
Si hay un tema que Los Secretos no comprenden actualmente es la oleada de censura artística que vive la sociedad actual. Aunque ellos no traten mensajes reivindicativos en sus letras defienden que el hecho de "que la política se refleje en la música es tan natural como que el agua es transparente".
El caso de Valtonyc o los casos más recientes de las cancelaciones de artistas como Pedro Pastor o C. Tangana son los más sonados a día de hoy. Álvaro Urquijo manifiesta que en el franquismo existía una censura que manifestó grupos con canciones protesta pero que tras la muerte del dictador todo cambió. “Esa sensación de que la cultura era de rojos desapareció con la llegada de la democracia”. La gente, los pudientes, ya no tenían que viajar a Londres para comprar discos que en España eran imposibles de encontrar. Llegó la movida madrileña y las ansias de "fiesta" y "libertad".
"En los 80 ni Alianza Popular ni el partido más izquierdista hubieran prohibido las canciones que se censuran actualmente", opinan los tres integrantes del grupo. Ellos mismos fueron criticados en 2015 por actuar en Motauros, un pequeño festival de moteros que se celebra en Tordesillas —localidad en la que se celebra el Toro de la Vega—. "Nos decían que estábamos apoyando el maltrato animal".
Urquijo concluye con un mensaje claro: "El arte debería ser libre". Los Secretos siguen transmitiendo la misma esencia en estos nuevos tiempos que corren y así lo demuestran en su gira. El próximo concierto es el 27 de septiembre y el 17 de noviembre llenarán el WiZink Center por el 20 aniversario de la muerte de Enrique Urquijo.