Su nombre está en boca de todos, Rosalía ha acaparado los Latin Grammy. En la alfombra roja de los premios más importantes de la música latina todos tenían ganas de lo mismo: "ver a la barcelonesa" y todos admiraban su disco El mal querer, el fenómeno nominado a Álbum del año.
"El mal querer se hizo con dos portátiles, la tarjeta de sonido y un micro, en un piso bien pequeño durante año y medio", recordó Rosalía en una entrevista con Efe, emocionada, minutos antes de que comenzara la gala.
En ese instante, ese trabajo que ha revolucionado al mundo latino, europeo y norteamericano, ya había logrado tres premios Latin Grammy en la gala previa al gran espectáculo televisado: Mejor álbum pop vocal contemporáneo, Mejor diseño de empaque (trabajo de Man Mourentan y Tamara Pérez) y la Mejor ingeniería de grabación por la producción de El Guincho.
Aún quedaba su actuación estelar, a ritmo de A Palé y Yo x ti, tú x mí y Con Altura, más la entrega de las categorías más importantes de los galardones. Precisamente en el show que montó al interpretar Con Altura no estuvo presente J Balvin. Cuando se conocieron las candidaturas para los premios de la Academia Latina de la Grabación, estrellas del género urbano como él o Daddy Yankee criticaron la escasa presencia del reguetón y el trap entre los nominados cuando estos artistas latinos están consiguiendo un gran éxito y relevancia en el panorama global.
"No hacen falta muchas cosas para llevar adelante una idea creativa", dijo la estrella ante la mirada atenta de toda la alfombra roja, donde también demostró que, además de fenómeno musical, es un icono de estilo.
En cambio, Rosalía comparó con naturalidad la elegancia de esta noche con el proceso creativo de su disco: "De glamour poco", ironizó sobre unas sesiones de grabación que han derivado en una ola de admiración que la artista surfea con impecable estilo.