Isabel II de España, también conocida como “la de los tristes destinos” o “la reina castiza” fue, además de una de las reinas más jóvenes de la historia de España, al convertirse en reina con tan solo tres años de edad, también una de las reinas más peculiares de la historia de España. Y es que desde el comienzo de su andadura en el trono el 29 de septiembre de 1833 y tras la muerte de su padre Fernando VII, su vida estuvo repleta de responsabilidades, de dificultades como reina y mujer, pero también de numerosas anécdotas y curiosidades, muy relacionadas con su peculiar carácter.
Una primera monarca de la historia de España, que también fue víctima de su propia corona, de la situación política de la España de la época y de sus placeres carnales. Tanto la población de la época como los futuros historiadores, la retrataron como negada para las matemáticas y la lectura, ignorante, simple, excesivamente frívola en ocasiones, caprichosa y muy propensa a las aventuras amorosas. De hecho, su vida sexual trajo de cabeza a la corte de la época. En su favor, se destaca su gran corazón y generosidad.
Curiosidades de Isabel II que no conocías
Una vida repleta de rumores y tópicos que la convierten en una de las reinas más populares de la Historia de España y de la que esta vez te desvelamos algunas curiosidades que puede que desconozcas:
“La reina ninfómana”
A lo largo de la historia son muchos los que han asegurado que Isabel II de España fue una reina ninfómana, sobre todo por su ajetreada vida sexual y concretamente por el general Francisco Serrano, quien contribuyó a que se ganase la fama de una mujer insaciable en lo sexual. Rumores a los que se unió la opinión del Papa Pío IX quien literalmete la definió como “Puta, pero pía”. Sin embargo son muchos los que defienden que lejos de ser una reina ninfómana, Isabel II fue simplemente una reina mal casada y víctima de los rumores de sus muchos detractores. Todo ello en una sociedad especialmente marcada por los sesgos de género de la época.
Su derecho al trono provocó las guerras carlistas
Isabel II de España fue nombrada reina el 29 de septiembre de 1833 sin haber cumplido los tres años de edad y gracias a la derogación de la Ley Sálica, la cual permitió que la descendencia femenina de Fernando VII pudiese reinar tras su fallecimiento y al no haber tenido hijos varones. Debido a su corta edad, su madre María Cristina fue regente hasta que se adelantó la mayoría de edad de su hija a los 13 años para que pudiese reinar. Pero fue precisamente su coronación la que inició un largo conflicto dinástico que provocaría las Guerras Carlistas, ya que su tío el infante Carlos María Isidro de Borbón, no aceptó a su sobrina como reina de España.
Su vida era una auténtica fiesta
Se dice que la reina se acostaba a las 5 de la mañana y se levantaba a las 2 de la tarde
Se casó a los 16 años con Francisco de Asís de Borbón
Con tan solo 16 años Isabel II de España se unió en matrimonio a Francisco de Asís, del que era conocida su homosexualidad. Dicen que al conocer el nombre de su futuro marido Isabel II se negó y gritó “¡No con Paquita no!”.
Sobrevivió a un intento de asesinato
El 2 de febrero de 1852 el cura Martín Merino intentó asesinar a la reina con un estilete. Un intento de asesinato en el que la suerte estuvo de parte de Isabel II, ya que el cuchillo rebotó en las varillas de su corsé consiguiendo que el arma solo le provocase una herida de 15 mm. El cura fue condenado a muerte y ejecutado.
Una tensa carrera con un toro
Otra anécdota conocida es la que sucedió el 21 de enero de 1851 cuando la reina acudía a ver a la Virgen de Atocha en su carruaje. Cuentan que de repente un toro escapado por la ciudad se puso a la altura del carruaje en el que viajaba la reina y que ambos mantuvieron una tensa carrera ante la mirada de los viandantes. Una carrera que después el propio toro daría por finalizada sin llegar a embestir ni al carruaje, ni a los caballos.
Numerosos amantes
“Me echaron de España por tener amantes”, cuentan que aseguraba Isabel II antes de fallecer en París, donde se exilió tras la revolución de La Gloriosa. Y es que su alta actividad sexual era más que conocida en la corte, llegando a llevar a su cama a numerosos guardias, militares y nobles, entre los que se habla de Emilio Arrieta, el general Francisco Serrano o el general O’Donnell, entre otros muchos.
Dio a luz hasta en doce ocasiones
Isabel II dio a luz hasta en doce ocasiones, pero sólo seis de sus hijos sobrevivieron a los primeros años de vida.
Varios puntos de la capital la recuerdan
En Madrid existen varios puntos en los que se la recuerda, como la Plaza de Isabel II, más conocida como Plaza de Ópera y en cuyo centro se encuentra una escultura en honor a Isabel II de España.