En España uno de los símbolos más llamativos es el de la Cruz Templaria. Más allá de esto, existen libros, películas, videojuegos, canciones… Multitud de obras se han inspirado en la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo del Templo de Salomón. Desde luego, el pasado de los caballeros templarios trasciende las polvorientas páginas de la historia medieval. Más allá de los misterios y leyendas que la cultura popular les ha atribuido a estos caballeros, lo cierto es que su legado aún permanece muy vivo a pesar del transcurrir de los siglos. Prueba de ello son los 10 monumentos templarios más impresionantes de España que ha recogido en este listado Civitatis, la empresa líder en la reserva de visitas guiadas, excursiones y free tour en español por todo el mundo.
Los antiguos reinos de Castilla, Navarra y Aragón no fueron ajenos al legendario pasado de los templarios, que erigieron templos, ermitas y castillos en todos estos territorios. Gran parte de estos monumentos aún resisten el paso de los tiempos, como prueba del vigor y la resistencia de los Caballeros del Temple.
1. El Castillo de Peníscola
La frase tan española de “mantenerse en sus trece” no es nueva. El origen de esta expresión debemos buscarla en el castillo de Peñíscola, donde Benedicto XIII, el llamado Papa Luna, se mantuvo fiel a sus principios y no quiso renunciar a sus privilegios.
Más allá de esta anécdota, la fortaleza castellonense del castillo de Peñíscola destaca además por ser uno de los principales baluartes españoles de origen templario. Solo por contemplar las vistas del mar Mediterráneo que ofrece desde sus almenas y torreones, ya merece la pena visitar este legendario bastión medieval.
2. El Castillo de Ponferrada
La historia templaria de España no podría entenderse sin el castillo de Ponferrada, ya que en su interior se puede casi palpar el espíritu de la orden del Temple. El foso, almenas y torreones de esta espectacular fortaleza situada a orillas del río Sil nos trasladan directamente a la Edad Media.
3. La Ermita de la Vera Cruz, en Segovia
Gran parte de los turistas que visitan el Alcázar de Segovia, cuando se asoman desde alguno de sus torreones, se preguntan qué iglesia será aquélla que se ve a lo lejos, y que presenta una curiosa forma circular. Este bellísimo templo románico no es otro que la Ermita de la Vera Cruz, cuya construcción se atribuye a los caballeros templarios.
Mucho se ha teorizado sobre este templo, que también fue conocido en el pasado como la Iglesia del Santo Sepulcro. Sean ciertas o no las leyendas templarias que se cuentan sobre este monumento, bien merece la pena ir a Segovia para comprobar su autenticidad.
4. El Castillo de Jerez de los Caballeros
Solo su nombre ya lo evoca todo: Jerez de los Caballeros. Este hermoso pueblo de la provincia de Badajoz alberga, sin lugar a dudas, uno de los castillos templarios más asombrosos de España. Según las crónicas de la época, la fortaleza pasó a formar parte de la Orden del Temple en el siglo XIII, cuando el rey Alfonso IX pudo vencer a los musulmanes y reconquistar esta zona de Extremadura.
5. El Castillo de Monzón
El reino de Aragón también acogió a los caballeros de la Orden Templaria. Prueba de ello es el castillo de Monzón, en el que además se educó el futuro rey Jaime I “el Conquistador”. La fortaleza alberga también un centro de interpretación dedicado al Temple, indispensable para conocer la historia de la orden. El castillo resulta una excusa perfecta para visitar el resto del casco antiguo de la localidad, que ha acogido en diversas épocas diferentes sesiones de las cortes de Aragón.
6. La Iglesia de San Juan, en Castrojeriz
Castrojeriz, municipio de la provincia de Burgos, alberga uno de los 10 monumentos templarios más impresionantes de España. Se trata de la iglesia de San Juan, muy vinculada a la orden y, por supuesto, al arte románico. Los enamorados de este estilo arquitectónico, artístico y cultural sin duda tienen una cita en Castrojeriz.
7. El Castillo de Caravaca de la Cruz
Plena Reconquista. Un tiempo convulso e incierto, de disputas en frontera. En ese contexto, el rey castellano Alfonso X, apodado “el Sabio”, dona a la Orden del Temple el castillo de Caravaca de la Cruz. Desde entonces, esta fortaleza, una de las más bellas de la Región de Murcia, ha sido objeto de multitud de misterios, leyendas y enigmas que solo pueden ser conocidos cuando uno se adentra en este inexpugnable bastión.
8. El Castillo de Tortosa
Quienes se hospedan en el Parador Nacional de Turismo de Tortosa disfrutan de unas extraordinarias vistas panorámicas sobre el río Ebro. No es para menos, ya que este hotel está ubicado en el castillo de la Zuda: una fortificación que perteneció a la orden de los Caballeros del Temple.
9. La Iglesia de Santa María de Eunate
Una de las principales joyas románicas de la Comunidad Foral de Navarra es la Iglesia de Santa María de Eunate que, además, constituye uno de los más destacados monumentos templarios de la región. De hecho, esta iglesia guarda ciertos vínculos y similitudes con la ermita segoviana de la Vera Cruz, mencionada previamente. ¿Casualidad?
10. El Castillo de San Servando, en Toledo
Entre las estrechas callejuelas del centro histórico de Toledo y el río Tajo se encuentra el bellísimo puente de Alcántara. Si cruzamos por esta pasarela a la otra orilla llegaremos al Castillo de San Servando: una fortaleza de origen templario que actualmente acoge un albergue juvenil.
Aunque la cuesta hasta San Servando es pronunciada, merece la pena subir hasta el castillo. Bajo sus torreones se puede divisar una de las estampas más bellas de Toledo, con el icónico Alcázar de fondo.