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¿Por qué en España hay muchos apellidos que acaban en ‘ez’?
¿Por qué en España hay muchos apellidos que acaban en ‘ez’?
En España, ocho de los nueve apellidos más comunes acaban con el sufijo -ez, terminación que se aplica con un sentido originario de 'hijo de' y que proviene de siglo XIII.
4 marzo, 2022 11:03En España los apellidos más comunes son Fernández (912.009 personas), López (869.944 personas), Martínez (832.525 personas), Sánchez (816.968 personas), Pérez (777.950 personas), Gómez (491.596 personas) y Martín (486.852 personas). Como vemos, muchos de ellos terminados en "ez". Sin embargo, ¿qué significa esto? y ¿de dónde proviene? Aquí buscamos darte la explicación histórica del surgimiento de tantos apellidos con esta terminación.
El verdadero origen y significado de los apellidos terminados en 'ez'
En primer lugar, la RAE define la palabra "apellido" como "nombre de familia con que se distinguen las personas", "sobrenombre o mote". Por lo tanto, los apellidos nacen de la necesidad de identificar a una persona no sólo por su "nombre", sino por su "pertenencia", es decir, su vínculo a una familia y a un lugar.
Siempre ha sido necesaria esa fórmula lingüística de identificación, de hecho, durante mucho tiempo se llamaba a las personas no por su apellido, sino por su profesión, lugar de nacimiento o particularidad física. Los ejemplos pueden ser los siguientes: Carlos el Molinero (profesión), Carlos el Sevillano (su lugar de origen) o Carlos el Delgado (por una peculiaridad física). Y como no, no podemos olvidar una última fórmula identificativa: Llamar a una persona con nombre, seguido del nombre de su padre, por ejemplo: Carlos, el hijo de Rodrigo. Durante mucho tiempo estas formulaciones eran consideradas como "apellidos" puesto que cumplían la función buscada.
Sin embargo, en la Edad Media ya surgen los apellidos propiamente y como los conocemos hoy en día. Concretamente, estos nacen cuando las clases altas empezaron a usarlos a partir del siglo XIII. Sería en ese momento cuando comenzaron a utilizarse los apellidos acabados en -ez, que significan 'hijo de'. Sin embargo, el origen de esta fórmula se desconoce, y así lo establece Alfaro de Prado.
Esta terminación -ez significa 'hijo de' y por lo tanto: Fernández era el hijo de Fernando; Rodríguez el de Rodrigo; Sánchez el de Sancho; Pérez el de Pere; Gómez de Gome o Gomo; Hernández el hijo de Hernando, Álvarez el hijo de Álvaro; Menéndez el hijo de Menendo; Gónzalez hijo de Gonzalo; Martínez hijo de Martín; López hijo de Lope... Sin embargo, en español, "ez" por sí sólo no quiere decir nada.
Fernando González del Campo, genealogista dice lo siguiente: "Si lo comparamos con los apellidos de otros países de lengua románica, como Francia, Italia o Rumania, los únicos que utilizan esta terminación son los de la península Ibérica".
También dice lo siguiente: "Sabemos que el uso del patronímico 'ez' ya estaba extendido en Navarra en los siglos VIII y IX", escriben en Heraldaria. "De hecho, García Íñiguez era el nombre del rey de Navarra que, en el año 851 u 852 sucedió a su padre, llamado Íñigo".