Dóciles, cariñosos, inteligentes… Los conejos también pueden ser el perfecto animal de compañía, de ahí que también sean uno de los animales favoritos por muchas familias de España y por detrás de los perros y los gatos. Pero a pesar de que los conejos pueden parecer animales muy sencillos de cuidar, la realidad es que el organismo de estos animales es más complejo de lo que imaginas. De esa atención y cuidado adecuados es de lo que dependerá que pueda disfrutar de una vida plena y larga. Y precisamente entre esos cuidados destaca la importancia de una buena alimentación y variada, en la que se incluya heno, pienso, además de frutas o verduras aptas para los conejos y teniendo precaución con otros alimentos prohibidos o menos recomendables como puede ser el plátano. Pero si es la primera vez que vas a adoptar un conejo, puede que esto aún sea una incógnita para ti.
¿Quieres saber qué comen los conejos? Sigue leyendo para descubrir los alimentos fundamentales con los que garantizarás una dieta y vida saludables a tu nuevo y peludo compañero de vida.
¿En qué se fundamenta la alimentación básica de los conejos?
Los conejos necesitan de una alimentación variada que vaya más allá del pienso y del heno. Una alimentación que también sea rica en nutrientes y fibras y que sobre todo sea adecuada en cantidad a su peso. Todo esto garantizará que su sistema digestivo esté en perfecto estado.
Además de estas claves en su alimentación, también es recomendable establecer un horario regular de comidas dividiendo su alimentación por ejemplo en dos tomas al día. Por supuesto, tampoco podemos olvidarnos de la importancia de una buena hidratación, así que asegúrate de que siempre tenga a mano agua limpia y fresca y procura cambiarla al menos cada dos días.
¿Qué come un conejo?
Teniendo en cuenta todos estos puntos fundamentales en su alimentación, es el momento de repasar todos y cada uno de esos alimentos que podrás incorporar en sus comidas diarias y que asegurarán que el sistema digestivo del conejo se mantenga sano y fuerte. Toma nota.
Heno
El heno siempre tiene que ser la base de la alimentación de un conejo y por ello tendremos que asegurarnos de que come el suficiente, constituyendo al menos el 70% de la alimentación. El heno es un producto resultado de diferentes tipos de plantas que se han recogido cuando estaban verdes y que posteriormente se han dejado secar. Así que en el mercado podremos encontrar henos de diferentes tipos de plantas y por lo tanto también de henos con diferentes propiedades nutricionales. Los más habituales para dar de comer a los animales son los henos de gramíneas y los de leguminosas. En concreto los de gramíneas están indicados para conejos adultos, ya que cuentan con menor cantidad de proteínas y calcio. Por otro lado, los de leguminosas son más adecuados para conejos en periodo de crecimiento, hembras gestantes o lactantes. En el caso de dárselo a conejos adultos, tendremos que restringirlo bastante sin llegar a eliminarlo, ofreciéndolo una vez a la semana y proporcionándole heno de gramíneas como base de su alimentación.
También tendremos que asegurarnos de que el heno esté fresco, verde y con un olor intenso, ya que esto asegurará que sea más apetecible. Para conservarlo no olvides guardarlo en un lugar protegido de la humedad y el calor, pero nunca en un recipiente hermético y sin ventilación.
Pienso para conejos
El pienso más adecuado para los conejos es el tipo pellets (un tipo de hierba prensada). En cambio debemos excluir todos aquellos piensos compuestos por cereales y semillas, una de las razones de ello es que los conejos acaban eligiendo los trozos de pienso que más le gustan, que normalmente suelen ser las partes más grasas y precisamente esto puede acabar siendo un inconveniente en la dieta de cualquier conejo.
Te aconsejamos que mezcles una o dos cucharadas soperas de pienso tipo pellets (menos en el caso de conejos más jóvenes) en un comedero y junto con el heno.
Hierba fresca, hojas o verduras
Fuente de calcio, vitaminas, nutrientes esenciales... Todo esto es lo que garantizará al conejo la hierba fresca, las hojas de determinadas verduras y la propia verdura. Te recomendamos que en el caso de las hojas te decantes por utilizar las de apio, zanahoria, acelga, tomillo, perejil, espinacas, diente de León, remolacha o la borraja, entre otras. Pero procura siempre recurrir a hojas de plantas y verduras conocidas.
En cuanto a las verduras, los conejos adoran las verduras fibrosas como las alcachofas, la coliflor, el calabacín, las judías verdes, el pimiento, el brócoli, el tomate, el pepino o la zanahoria, entre otras. Procura proporcionarle dos o tres veces por semana y en pequeña cantidad a modo de premio.
Frutas
Las frutas se consideran un alimento especial y no un alimento imprescindible para los conejos, así que tendrás que dárselas en pequeñas cantidades como premio y nunca de forma diaria. La manzana, las cerezas, kiwis, fresas, mandarina, naranja, mango, melón, papaya, pera, sandía, piña... Todas son buenas opciones y frutas recomendadas para incluir en la dieta de un conejo, pero en el caso de las frutas con pepita acuérdate siempre de retirar la pepita con antelación.
Alimentos prohibidos para los conejos
Como te hemos explicado, la alimentación de nuestros amigos los conejos tiene que estar basada en heno, pienso, frutas y verduras recomendadas. Pero que sean animales herbívoros, no quiere decir que puedan alimentarse de todas las verduras y plantas. De hecho, algunas de ellas pueden ser tóxicas y estar prohibidas para nuestro conejo. Estas son algunas de ellas:
Algunas frutas y verduras prohibidas: Patata, Boniato, Ajo, Cebolla, Nabo, Puerros, guisantes, habas, higos, albaricoques, aguacate, plátanos…
Plantas prohibidas: Helechos, Cicuta, Hiedra, Laurel, Narcisos, Belladona, Amapolas, Tulipanes, Yerba buena, Madre selva...
Otros alimentos prohibidos: Arroz, Maíz, Nueces, Galletas, Pan, Mantequilla, Avena, Queso...