Mientras el Real Madrid va vaciando su enfermería, va llenando su cuenta de puntos para mantenerse como líder de la clasificación. Ante Las Palmas, el equipo blanco arrancó fuerte y se tumbó a descansar en la segunda mitad. Dos goles tempraneros le dieron el colchón suficiente para poder ahorrar esfuerzos durante el resto del partido. Sólo cuando Hernán recortó distancias volvieron a apretar los de Rafa Benítez para firmar el 3-1 definitivo antes del descanso.
Sigue invicto el Real Madrid tras la visita de Las Palmas, un equipo que llegaba al Santiago Bernabéu con demasiados conceptos a los que adaptarse tras la llegada de Quique Setién a su banquillo. Desde la zona de descenso, las cosas se ven de otra manera. Una perspectiva con demasiados nervios, que se vieron en el conjunto isleño ante la salida con toque de corneta del equipo merengue.
No le afectaron las bajas a la escuadra local, que presentó un centro del campo con mezcla de toque y fantasía por parte de Modric, Kroos e Isco con un hombre más de contención como Casemiro. Arriba, Cristiano Ronaldo y Jesé, que se enfrentaba al equipo de su ciudad de origen. El canario sigue recuperando sensaciones, algo que demostró con su gol antes de que el árbitro pitase el camino a vestuarios.
No era el único para el que el choque desprendía melancolía. Willian José, que pasó por la cantera blanca, se enfrentaba al que fue su equipo. Frente a él, Casilla daba el relevo a Keylor Navas. El guardameta titular no pudo mantener la portería del Santiago Bernabéu imbatida: Las Palmas, gracias al gol de Hernán, estrenó la recogida de redes del Real Madrid esta Liga como local. Su cabezazo tras saque de esquina en el minuto 38, que tocó suelo y larguero antes de cruzar la línea, era el premio a la mejora del equipo de Setién.
Ese paso adelante era necesario después de un comienzo de piernas temblorosas. No lo desaprovechó el Real Madrid, que por medio de Isco ya se había adelantado en el tercer minuto tras una recuperación en presión alta que favoreció el pase de Casemiro al hueco. Un tanto que no sació la sed de sangre de los blancos. Cristiano volvió a marcar, empatando con Neymar como máximo goleador del campeonato, diez minutos más tarde, y también a pase del brasileño. Marcelo, desde la izquierda, puso un centro para que el delantero portugués se lanzase y sumase el segundo de cabeza.
Dos tantos que permitieron bajar el listón y empezar a preocuparse por el próximo duelo del Real Madrid en Champions League, el martes ante el PSG. Al menos hasta el pequeño susto por parte de Hernán y respuesta blanca con tanto de Jesé. La salida de vestuarios dejó claras las intenciones blancas. Rafa Benítez quitó a Modric, que se va recuperando tras su lesión. En su lugar, salió Lucas Vázquez. Un aviso de lo que vendría después: Marcos Llorente y Borja Mayoral tuvieron oportunidades y dieron descanso a Kroos y Jesé.
Fueron las sustituciones lo más destacado de una segunda mitad que contrastó con los primeros 45 minutos, llenos de ocasiones y goles. Cristiano Ronaldo intentó aumentar su cuenta goleadora, pero Javi Varas decidió con sus intervenciones que el marcador no se volvería a mover. Nada que sirviese a Las Palmas para evitar la derrota. Los canarios sólo han ganado uno de los diez partidos disputados. Situación opuesta a la de su rival, que afianza el liderato con un triunfo mientras sigue recuperando efectivos.