"Ha empezado la guerra", dijo la semana pasada Ángel María Villar a una decena de presidentes federativos autonómicos reunidos en un hotel de Madrid para sumar fuerzas de cara a las elecciones en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) del próximo 22 de mayo. Ni se equivocaba, ni exageraba: el longevo enfrentamiento entre el sector del fútbol que apoya a Villar y el que apoya a Javier Tebas (presidente de la Liga del Fútbol Profesional), representado por el Jorge Pérez en dichas elecciones, promete animar notablemente el periodismo deportivo español en las once semanas que restan hasta la votación que podría terminar con 28 años de presidencia ininterrumpida del abogado vasco en el fútbol español.
Ambos bandos preparan minuciosamente su arsenal de papeles y presuntas corruptelas para deslegitimar la candidatura rival a medida que transcurra la campaña electoral. En la primera prueba seria de la capacidad de Jorge Pérez (antiguo aliado de Villar y secretario general de la RFEF hasta hace cinco meses) para derrocar a su antiguo mentor, el bilbaíno ha vuelto a demostrar el grosor de la piel que le ha granjeado un aura de imbatibilidad.
'Caso Recre' y 'Caso Marino'
El primer paso fue la declaración de Villar el pasado 23 de enero, en el juzgado de Majadahonda, por el 'caso Recre' y el 'caso Marino': los presuntos tratos de favor al club onubense y al tinerfeño (préstamos para impedir su desaparición), por el que sus enemigos más optimistas confiaban incluso en que sería inhabilitado para las elecciones. La jugada no salió bien: Villar consiguió ese día de hecho que el juez Gregorio María Callejo investigase también desde ese momento a Jorge Pérez, que en aquella época habría rubricado con su firma las decisiones federativas como secretario general, y también a Marcelino Maté, presidente de la Comisión de Segunda B.
Tanto Pérez como Maté se vieron obligados a declarar el pasado 15 de febrero en el juzgado de primera instancia de Majadahonda en un caso donde la Fiscalía intenta averiguar si los dirigentes cometieron irregularidades contables tipificadas como malversación de fondos y/o prevaricación. El querellante inicial fue Miguel Ángel Galán, presidente de la Escuela de Entrenadores Cenafe, que en un principio se postuló como tercer candidato en las elecciones a la presidencia de la RFEF.
El 'caso Haití'
Galán, otro enemigo acérrimo de Villar, también había acudido a la Justicia por el retraso en el reglamento y la fecha de las elecciones a la Federación (un conflicto de un año, tan enconado que derivó en la salida del anterior secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, en octubre). Y por un tercer asunto: el 'caso Haití', una subvención pública de 1,2 millones de euros otorgada en 2011 para el desarrollo del fútbol en países de África, Centroamérica e Iberoamérica. Según el Consejo Superior de Deportes (CSD), del total de lo concedido sólo se ha acreditado debidamente el uso de 100.000 euros.
La Federación, acosada por esta denuncia, devolvió los 1,2 millones (más 300.000 euros de intereses de demora) el pasado mes diciembre ante la defectuosa justificación presentada. La transferencia del dinero se interpretó como un reconocimiento de culpabilidad y parecía abocar a Villar a un escenario preelectoral nefasto. Pero según publicó El País este martes, Villar, apoyado en un informe pericial, ha asegurado en un escrito al CSD que su firma fue falsificada en nueve ocasiones y señala como responsables del presunto fraude de la subvención precisamente a Jorge Pérez y otros empleados de la Federación.
Según ha podido saber EL ESPAÑOL, la Federación piensa incluso contraatacar y añadir estas pesquisas al proceso judicial ya existente en los juzgados de Majadahonda (los abiertos por Miguel Galán). En la práctica, ello significa que Pérez habría perdido la ventaja inicial de ver en aprietos a Villar de cara a unas elecciones, con la incertidumbre añadida de hipotéticos problemas personales con la Justicia.
Escenario bélico
Ambas candidaturas a presidir el fútbol español vaticinan filtraciones interesadas a la prensa en las próximas semanas, y los bufetes de abogados contratados trabajan sin descanso para preparar alegaciones y acusaciones. Aunque Ángel María Villar es todavía favorito en los comicios, el apoyo de Javier Tebas y de sectores del fútbol profesional convierten a Jorge Pérez en el candidato con más empaque desde la alternativa fallida de Gerardo González (otro exsecretario general de Villar) en 2004.
Desde entonces, el fútbol español se ha mantenido dividido en bloques, pero Villar ha sabido mantener el poder contra críticos, denuncias, poder político y prensa en un mundo crecientemente judicializado. Como señala un miembro de su entorno próximo, "están muy equivocados si creen que le van a tumbar con cuatro querellas. Villar no comete errores; y además, no se engañe, casi todo el mundo tiene ya decidido su voto".