Estadios del futuro con el sello de ACS
Aunando diseño y versatilidad, la compañía española se ha encargado de construir los recintos deportivos más emblemáticos del mundo.
Como sucedió siglos atrás con las grandes catedrales o, más recientemente, con los rascacielos que desde hace décadas compiten por conquistar las alturas, actualmente se vive un momento en el que los recintos deportivos han asumido un papel protagonista en la arquitectura. Son edificios versátiles, inteligentes, que trascienden su función básica y que se abren, en muchos casos, a otros usos totalmente diferentes. Y, por supuesto, que gozan de un diseño que los convierte en iconos y atracciones turísticas de las ciudades en las que se ubican.
El paso del tiempo pone de manifiesto estos cambios de tendencia que afectan a la concepción de los estadios, que los convierten en algo único y con personalidad propia. Es algo que responde a cuestiones estéticas y funcionales, pero también a la necesidad de explotar unos espacios que, actualmente, ya no se abren únicamente los días de partido sino que aspiran a acoger eventos de todo tipo con los que rentabilizar la inversión que supone. Esto está ocurriendo con los recintos que acogen la mayoría de los deportes más populares en todo el mundo: fútbol, baloncesto, fútbol americano, béisbol…
Los clubes y las ciudades que han decidido dar un paso adelante y actualizar sus instalaciones lo han hecho, además, anteponiendo los criterios de sostenibilidad y de accesibilidad que se tienen en cuenta para erigir cualquier gran construcción actual. No obstante, por su propia definición, este tipo de edificios añaden una serie de peculiaridades: tener una capacidad adecuada -masiva en algunos casos-, buena visibilidad, comodidad para los espectadores y, cada vez con mayor frecuencia, facilidades para adaptar sus espacios para ofrecer servicios adicionales que remarcan este carácter multiusos.
Pero hacer realidad estos estadios supone un esfuerzo desde muchos puntos de vista y, por eso, solo las empresas con una mayor experiencia en el campo pueden alcanzar los resultados más satisfactorios. Dado su porfolio de proyectos ejecutados y en proceso, el Grupo ACS se ha convertido en uno de los referentes mundiales en el sector. A través de la actividad de alguna de sus filiales, como Hochtief en Europa o Turner Construction en Estados Unidos, la compañía española ha participado en la construcción o remodelación de algunos de los recintos más icónicos y significativos del mundo.
SoFi Stadium, la joya de Los Ángeles
Por su tamaño, está claro que los grandes estadios que acogen los partidos de la NFL llaman la atención por sí mismos. Sin embargo, algunas de las obras en las que ha participado Turner han ayudado a dar un salto de calidad a las instalaciones de los equipos de esta liga e incluso a las propias ciudades. Es el caso de Los Ángeles, donde se ubica el SoFi Stadium, una magna construcción para 70.000 espectadores que acoge a los dos principales equipos de la ciudad (los Rams y los Chargers) y en cuya tarjeta de presentación está el ser el más grande de la competición.
Pero este dato no es tan deslumbrante como su aspecto y la complejidad técnica que exigió su construcción, en la que destaca una inmensa cubierta semitranslúcida y abierta con más de 90.000 metros cuadrados de superficie. Como una gigantesca vela, esta cubre no solo el terreno de juego y las gradas sino un complejo en el que se incluye un espacio exterior al aire libre de 2,5 acres (aproximadamente una hectárea).
Pero los méritos de la puesta en escena del estadio van más allá, dado que posee, entre otras proezas de la ingeniería, un espacio para eventos a 30 metros bajo el nivel del suelo y la mayor pantalla del mundo del deporte.
El estadio está llamado a convertirse en una de las mayores atracciones del deporte nortemericano. Pese a su reciente inauguración, en 2020, el SoFi Stadium ya ha acogido un gran evento como fue la SuperBowl de 2022. Se trata del primero de los que vendrán en el futuro, ya que el recinto acogerá partidos del próximo Mundial de fútbol de 2026 e incluso será la sede de las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos Olímpicos de 2028.
El escaparate global del Mundial 2026
El torneo de fútbol de 2026, que se disputará conjuntamente entre EEUU, Canadá y México, también servirá para que ojos de todo el planeta puedan contemplar otros estadios que se han levantado en los últimos años para la NFL, pero que en este caso acogerán partidos del Mundial. Además del SoFi Stadium, Turner ha aportado su experiencia para erigir el Lincoln Financial Field de Philadelphia, el Lumen Field de Seattle, el Arrowhead de Kansas City y el Levi’s Stadium de San Francisco.
Precisamente este último recinto californiano, con un aforo oficial de 68.500 espectadores, es tal vez el más destacado de ellos. Y es que, en apenas una década de existencia, ha acogido más de 100 grandes acontecimientos de todo tipo, algunos aparentemente inverosímiles para un estadio de fútbol americano: desde partidos de hockey sobre hielo hasta carreras de coches, pasando por combates de lucha libre. De hecho, la celebración de un evento de wrestling ha sido el evento que ha reunido más gente en el Levi’s Stadium, casi 77.000 personas.
Pero al margen de su versatilidad, uno de los principales hitos de la instalación es el de estar considerado como la instalación deportiva con mayor eficiencia energética de Estados Unidos al tener la certificación LEED Gold. Turner, en una empresa conjunta, participó en el diseño y la construcción de un recinto que, además de lo expuesto, cuenta con más de 170.000 metros cuadrados y 165 palcos de lujo.
Además de estos recintos, Turner también ha erigido varios estadios que acogen equipos de la liga de fútbol de Estados Unidos, la Major League Soccer o MLS. Es el caso del Audi Field de Washington, un flamante estadio de 20.000 espectadores que añade a este carácter polivalente del resto, la certificación de máxima eficiencia energética LEED Gold. Además, dada su situación, en una zona industrial de la capital, también es considerado un proyecto bandera para la regeneración de la zona.
La filial del Grupo ACS en EEUU también ha levantado el TQL Stadium, sede del FC Cincinnati. La instalación cuenta con una capacidad de 26.000 aficionados y ha sido galardonada como Mejor Recinto en la Cumbre Mundial del Fútbol 2022 que se celebró en Madrid y con el Prix Versailles 2022, el premio mundial de arquitectura y diseño, en la categoría de deportes. A nivel técnico destaca que fue construido por fases mediante el uso de un modelo BIM 360 y que cuenta con un sistema de iluminación de última generación que aporta una atmósfera extra a los partidos.
Estadios míticos que entran en el siglo XXI
En paralelo a la construcción de estos grandes estadios, la experiencia de Turner también ha resultado clave en otros recintos que gozan de una extraordinaria notoriedad por su simbolismo, su ubicación o la historia de los clubes que acogen. El caso más paradigmático es el del Madison Square Garden de Nueva York, la Meca del baloncesto y un lugar de culto para los aficionados de todo el mundo. Un pabellón multiusos en el que juegan habitualmente los New York Knicks (NBA), New York Liberty (WNBA) y los New York Rangers (NHL).
Sin embargo, la historia deportiva del ‘estadio más famoso del mundo’ va mucho más allá, ya que está considerado un templo del boxeo, por ejemplo. Además, desde sus gradas se han podido ver conciertos y todo tipo de acontecimientos con los artistas más conocidos durante décadas. Turner ha unido su historia a la del pabellón desde el inicio ya que construyó el edificio original en 1962, y ha estado también en la renovación que se completó en 2013.
Este proceso, que se prolongó durante cuatro veranos, fue un reto para la filial del Grupo ACS dado que se llevó a cabo de tal manera que no fue necesario detener la siempre frenética agenda del recinto. La obra amplió las posibilidades del MSG ya que se construyó dentro un centro de congresos, un cine y un teatro.
Dada la trascendencia de la NBA en el deporte estadounidense, es lógico que muchas franquicias hayan seguido el mismo camino y renovar sus instalaciones para dar un salto de calidad. El más paradigmático es el complejo que Turner está construyendo en Los Ángeles para los Clippers, el Intuit Dome, curiosamente a escasos metros del SoFi Stadium.
Su estreno está previsto para 2024, momento en el que hasta 18.000 espectadores podrán disfrutar del mejor baloncesto, si bien la filosofía con la que nace el recinto es también la de generar anualmente ingresos por la celebración de todo tipo de eventos culturales y comerciales.
El mismo modelo se replica en otro de las nuevas sedes de un equipo de la NBA, en este caso de los Sacramento Kings. Se trate del Golden 1 Credit Union Center, un pabellón multiusos con capacidad para más de 17.500 aficionados que tiene algunas características únicas: es el primer recinto cubierto de EEUU en obtener la máxima calificación energética, la LEED Platino; es el edificio deportivo y de ocio más conectado del mundo y presenta una arquitectura con calles con árboles, restaurantes e incluso una plaza pública con césped.
No muy lejos de allí se ubica otro de los lugares más simbólicos en el mundo del deporte, el Yankee Stadium, considerado la ‘catedral del béisbol’. En este caso, Turner tuvo la responsabilidad de erigir este templo moderno para sustituir al edificio previo de 1923, con todo lo que suponía para la historia del club. De hecho, el nuevo edificio, terminado en 2009, mantiene en su fachada exterior reminiscencias del antiguo. Esto se consigue gracias al revestimiento de granito y el friso de cobre que, aparte de ser un guiño al pasado, es fruto de la última tecnología porque presenta una particularidad casi única: el haber sido prefabricado.
Además de las grandes ligas de baloncesto, béisbol o fútbol americano, los deportes de motor también son una religión en Estados Unidos. Por eso, la construcción de un nuevo circuito implica no solo ajustarse a las normativas de las distintas competiciones sino dotar a las instalaciones de los mejores accesos y tecnología posible para que el aficionado se sienta cómodo. Tales condiciones se dan en el proyecto mediante el cual Turner Constructions dio vida en 2001 al Kansas Speedway, un circuito de tres óvalos de 1,5 millas (2,4 km) situado en las afueras de Kansas City. Tiene capacidad para 75.000 espectadores y cuenta, además, con 68 palcos y hasta 40 edificios auxiliares. Actualmente acoge varias citas de la Nascar, entre otras competiciones y eventos.
Fútbol, eventos y todo tipo de servicios
El Grupo ACS, a través de Dragados, construyó también uno de nuestros estadios más emblemáticos: el Estadio Olímpico de Sevilla. Inaugurado en 1999 para acoger el Campeonato del Mundo de Atletismo que se celebró en la capital hispalense ese mismo año, el estadio cuenta con un aforo de 60.000 espectadores, siendo el quinto con mayor capacidad de España. Es una de las sedes habituales de los partidos de la Selección Española de Fútbol y, en la temporada 2019/2020, también albergó la Final de la Copa del Rey, privilegio que repetirá como mínimo durante un periodo de cuatro años.
En Europa, el Grupo ACS también es el protagonista de obras muy significativas que afectan a estadios en varios países. En este caso, algunos de los proyectos más relevantes los ha ejecutado otra de sus filiales, Hochtief. Por ejemplo, el concurso de la compañía fue clave para la renovación del Signal Iduna Park, el estadio del Borussia Dortmund.
Construido para el Mundial de 1974, ha tenido varias grandes modificaciones a lo largo de su historia. Con la primera, realizada por Hochtief, se elevó el aforo tras remodelar dos de sus gradas. Tuvo lugar entre 2000 y 2003, con lo que estuvo a punto para acoger partidos del Mundial 2006 que también se celebró en Alemania. En fases posteriores se volvió a ampliar su capacidad hasta los cerca de 80.000 espectadores que tiene en la actualidad, incluyendo la tribuna más grande de Europa, en la que entran casi 25.000 espectadores.
Muy cerca de Dortmund, precisamente, Hochtief erigió en Monchengladbach el Borussia Park, inaugurado en 2004. Tiene una capacidad máxima para los partidos locales de 54.000 espectadores y cuenta con la máxima consideración de la UEFA, lo que le convierte en una sede potencial para grandes eventos futbolísticos internacionales. El edificio también alberga zonas de restauración, tiendas, las oficinas del club y un museo de su historia.
En República Checa, Hochtief también es o ha sido protagonista en la puesta de largo de dos estadios en las principales ciudades del país. En la capital, la filial del Grupo ACS se encargó de reconstruir el Fortuna Stadium, casa del Slavia de Praga y sede habitual de la selección del país. Inaugurado en 2008, tiene una capacidad para 21.000 espectadores y ofrece el carácter polivalente de los más modernos estadios del mundo, ya que aloja locales comerciales, un centro de conferencias y, además, ha acogido grandes conciertos de estrellas internacionales.
Y con una concepción muy similar, Hochtief también tiene en el horizonte la construcción de un estadio multifuncional en Brno. El contrato, valorado en 180 millones de euros, incluye la ejecución de una instalación de ocho plantas que, a su término, dará cabida a 13.300 espectadores, y que contará con todo tipo de dependencias, dos niveles subterráneos y hasta 1.300 plazas de aparcamiento que darán servicio no solo en los días de partidos sino en los eventos del recinto ferial donde se ubica.